El gobernador Daniel Scioli, declaró la emergencia agropecuaria en 15 municipios y la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció que, a través del ministro de Planificación Federal al frente de Julio De Vido, se realizarán obras hídricas por 37 millones de pesos en diversos puntos de la provincia para intentar amortiguar el impacto de las inundaciones
Por su parte, el presidente saliente de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati , explicó que el panorama que se vive en la provincia de Buenos Aires es preocupante, donde miles de hectáreas están bajo el agua por las continuas precipitaciones que se registraron durante agosto, considerado como el mes más lluvioso en la historia.
“Las vacas están pariendo en el agua y se mueren los terneros”, manifestó en diálogo con Radio 10 el dirigente ruralista.”Parece una ironía que, después de la sequía que tuvimos desde la primavera del año pasado, ahora tengamos tantos campos inundados”, expresó.
Las inundaciones castigan a diversos distritos bonaerenses y las pérdidas se estiman en millones de pesos. Además, cientos de chicos no concurren a clases por la imposibilidad de acceder a las escuelas rurales. La problemática preocupa a inspectores y consejeros escolares, quienes sostienen que si bien algunos alumnos pueden trasladarse a otros establecimientos educativos, la mayoría tiene dificultades para salir de los campos en los que viven por los caminos anegados.
En Pehuajó, donde llovieron 1500 milímetros en lo que va del año, ya se cerraron definitivamente dos establecimientos rurales por las inundaciones, mientras que otros, como la Escuela Nº 30, tuvieron que ser trasladados a otras instituciones, ya que el paso de agua por las alcantarillas es constante y de gran intensidad.
25 de Mayo, Bolívar, Saladillo y General Alvear, transitan una situación similar, con establecimientos educativos cerrados por peligro de inundación. Otros distritos, como Lincoln y Azul aseguran que la situación, lentamente, se está revirtiendo.
Sin embargo, el estado intransitable en que se encuentran cientos de kilómetros de caminos rurales de la provincia por estar bajo agua, sumado a los puentes destrozados por las fuertes crecidas de los arroyos, mantienen aislados a varios pueblos del interior a los que sólo se puede acceder con tractores o a caballo para proveer a los pobladores de alimentos y medicamentos.
En tanto, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que cesó el alerta meteorológico dispuesto para las zonas noroeste, centro y sudoeste de la provincia, aunque pronosticó “tormentas con lluvias intensas” para el Río de la Plata y aledaños.