Armstrong retiró las afirmaciones de la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA, por sus siglas en inglés) de que había consumido sustancias que aumentaban el rendimiento para ganar la máxima competición del ciclismo de 1999 a 2005.
El ciclista dijo que la USADA carece de la autoridad para despojarlo de los títulos conquistados, pero el presidente de la USADA sí tiene las facultades para hacerlo y describió el caso de Armstrong como un ejemplo “desmoralizante” de la idea de ganar a toda costa en el ámbito deportivo.
La leyenda de Texas de 40 años, anunció que renunciaba a defenderse de las acusaciones de doping lanzadas por la Agencia.
“Hoy doy vuelta a la página”, dijo Armstrong en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter, en el que reafirma su inocencia y acusa a la Agencia Antidopaje de llevar a cabo “una caza de brujas contraria a la Constitución”.
El ciclista es conocido por la lucha contra un cáncer testicular descubierto a sus 25 años.