El objetivo del día es prevenir los riesgos asociados a la somnolencia diurna. Además, la iniciativa busca educar a la población sobre los diversos trastornos del sueño que existen, como el insomnio, que amenazan la salud y disminuyen la calidad de vida de las personas.
Las personas que sufren insomnio tienen más probabilidades de padecer depresión, ansiedad, hipertensión y enfermedades crónicas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), sólo el 10% de quienes sufren insomnio acude a una consulta médica y únicamente el 5% es correctamente diagnosticado.
La mayoría de la gente no sabe que los trastornos del sueño son enfermedades prevenibles y tratables, aunque menos de un tercio de los pacientes busca ayuda profesional.
Los trastornos pueden manifestarse de diversas formas, como dificultad para iniciar o mantener el sueño, problemas para mantenerse despiertos en horas apropiadas, conductas anormales (pesadillas o sonambulismo) mientras se duerme, entre otros.
Dormir es una función biológica básica de todos los seres vivos. Mientras la persona duerme se realizan funciones vitales a nivel de células y sistemas que contribuyen al bienestar físico y mental.
La medicina del sueño es una subespecialidad médica que se dedica al diagnóstico y tratamiento de los trastornos del sueño y desde 2008, por iniciativa de la Asociación Mundial de Medicina del Sueño (WASM, por su sigla en inglés), se celebra el día para prevenir una epidemia que afecta al 45% de la población mundial.
A dormir bien, a descansar y si no se puede, a consultar.
Más información:
http://www.fundacionfavaloro.org/dia_mundial_suenio_2012.htm