Un amparo presentado por la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT) a través de su equipo jurídico, en el marco de un proyecto nacional que propone la igualdad para todos y todas, generó un paso fundamental para la aprobación de la Ley de Matrimonio Igualitario en el país y lograr los mismos derechos con los mismos nombres para todas las personas.
Alex y José María estaban autorizados a casarse civilmente desde finales de noviembre de 2009, cuando un fallo de la jueza porteña Gabriela Seijas le indicó al Registro Civil que los una en matrimonio por considerar inconstitucionales y discriminatorios los artículos 172 y 188 del Código Civil que les negaba ese derecho.
Luego, un fallo de la jueza nacional en lo civil Marta Gómez Alsina fue acatado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y se les prohibió el derecho al casamiento.
Tras ello, desde la Federación Argentina LGBT se gestionaron las acciones necesarias para que, con la habilitación de la jueza Seijas y un recurso jerárquico ante la Justicia, se obtuviera el visto bueno que daría paso a la celebración del primer matrimonio gay de Argentina y de Latinoamérica.
El distrito que finalmente aceptó esa sentencia fue el de la gobernadora fueguina Fabiana Ríos, afín a los reclamos de la diversidad sexual y de la igualdad.
“En ese entonces parecía increíble, pero dos años más tarde sabemos que fue uno de los primeros peldaños de una escalera hacia la igualdad en Argentina. El orgullo y la alegría inmensa de poder ver hoy la película de lo que sucedió hasta que se convirtió en ley, es enorme. Después de este y tantos otros avances en materia de derechos humanos en nuestro país, siento que cualquier lucha por la justicia y la igualdad es no sólo posible sino impostergable”, apuntó María Rachid, Legisladora porteña y Secretaria General del espacio Mesa Nacional por la Igualdad.
Un año más tarde, desde el 15 de julio de 2010, Argentina se convirtió en el primer país de América Latina en reconocer el derecho del matrimonio igualitario en todo su territorio nacional. Además, se convirtió en el décimo país en legalizar la unión a nivel mundial.