La decisión del presidente Javier Milei de incluir a Fabricaciones Militares (FM), a la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) y a los Talleres Navales Dársena Norte (Tandanor) entre las compañías estatales sujetas a privatización de aprobarse la ley ómnibus hizo que se conformara un ejército ad hoc para oponerse a la enajenación y pase a manos privadas de estas firmas vinculadas a las Fuerzas Armadas y a la defensa nacional que tiene orden de ejecutar el ministro Luis Petri.
Esta fuerza opositora tiene tres armas: una legislativa, otra sindical y una tercera castrense. Tiene como una cabeza visible a la diputada radical por la provincia de Córdoba Gabriela Brouwer de Koning, enrolada en Evolución, quien ya advirtió que “bajo ningún aspecto” votará la ley ómnibus enviada por la administración libertaria al Congreso.
La legisladora tiene enfrente a Petri, el correligionario mendocino a cargo de la cartera de Defensa y con orden de la Casa Rosada de liquidar esas empresas estatales consideradas deficitarias y también revisar todos los contratos para la compra de equipamiento militar que autorizó la administración saliente de Alberto Fernández.
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Brouwer de Koning se pone al frente por territorialidad, dado que dos de las cinco plantas de Fabricaciones Militares están en la provincia mediterránea: una en Río Tercero, de donde es oriunda, y otra en Villa María. En Córdoba también está instalada FAdeA, la fábrica de aviones pensada para el mercado de las fuerzas armadas.
Otro integrante del ala legislativa de este ejército disconforme es el diputado de Unión por la Patria por la provincia de Santa Fe, Eduardo Toniolli, quien ya presentó una iniciativa con el objetivo de evitar la enajenación de las empresas militares por considerar que Milei pone en riesgo la soberanía nacional al permitir que el país pase a depender “totalmente de otros países para proveer a sus Fuerzas Armadas”.
Rama sindical
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) forma parte de este ejército opositor a raíz de que la privatización de estas empresas pone en riesgo las fuentes de trabajo de 939 personas en FAdeA; 804 en las plantas cordobesas de Río Tercero y Villa María; y un número similar en las de San Lorenzo (Santa Fe), (Jáchal) San Juan y Azul (Buenos Aires), más la sede central administrativa en el barrio porteño de Belgrano; y Tandanor con una plantilla de 460 personas.
A principios de enero, Brouwer de Koning visitó la sede gremial cordobesa para analizar con la representación sindical el impacto del proyecto privatizador de empresas estatales que propone la administración libertaria a través del decretazo y el articulado de la ley ómnibus. Los referentes sindicales también rechazan la iniciativa con el argumento de que "muchas de ellas generan ganancias y son altamente rentables".
La gremial estatal anunció también que estará presente este miércoles en la movilización convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT) y las dos vertientes de la Central de Trabajadores y Trabajadoras Argentinas (CTA).
Vertiente militar
Fuentes castrense consultadas por Letra P confirmaron que grupos de oficiales también integran esta task force antiprivatista debido al malestar creciente en las tres fuerzas por la inclusión de las empresas bajo órbita militar, con menor o mayor cuantía, en el plan de ajuste que introduce la ley ómnibus. Puntualmente critican que se encuadre al personal militar en el "Fondo de reconversión laboral" al que irían las personas empleadas de las firmas a privatizar y las atribuciones que reclama el Poder Ejecutivo para modificar leyes de defensa, seguridad e inteligencia.
FAdeA Pampa
FAdeA fabrica el avión Pampa
Fabricaciones Militares, FAdeA y Tandanor, las tres empresas con vínculos militares, fueron privatizadas durante la gestión de Carlos Menem y nuevamente estatizadas entre 2007 y 2009 bajo el gobienro kirchnerista.
Según la Ley de Presupuesto 2023, Fabricaciones Militares tuvo aportes del Tesoro (transferencias corrientes) por $8.480 millones y un resultado económico deficitario de $2.658 millones; FAdeA recibió $1.600, con saldo positivo de $240 millones; y Tandanor recibió transferencias por $37 millones y también obtuvo resultado positivo $1328 millones.