En tiempos de definiciones para el peronismo de Neuquén, que este año arriesgará bancas en el Senado y en Diputados, se profundiza la brecha entre viejos aliados hoy enemistados por la relación con el gobierno de Rolando Figueroa. Fue el presidente del Partido Justicialista ( PJ), Darío Martínez, quien apuntó contra el sector que se sumó al frente oficialista Neuquinizate.
“Fueron a buscar un conchabo y ahí los tienen”, lanzó el secretario de Energía del gobierno de Alberto Fernández, consultado por Letra P, sin nombrar al funcionariado justicialista que arribó al gabinete neuquino.
A quienes no nombró, claro, tienen linaje compañero. Una de ellas es la diputada nacional Tanya Bertoldi, hoy al mando de la poderosa Secretaría de Obras Públicas y la Unidad Provincial de Enlace y Ejecución de Proyectos con Financiamiento Externo (UPEFE), reducto clave para obtener financiamiento nacional y extranjero. Bertoldi, además de una funcionaria clave, ocupa el puesto de congresal del PJ a nivel provincial y construye masa crítica para que su partido avance en un acuerdo con Figueroa. Su mandato en la cámara baja finaliza en diciembre.
El otro dirigente cuestionado, pero no nombrado, es Marcelo Zúñiga, referente del Movimiento Evita, titular del PJ en la capital neuquina, que se sumó al gabinete rolista como subsecretario de Producción.
Neuquén y sus particularidades
“Al que le encanta ser empleado público, va a estar en el gobierno”, chicaneó Martínez, sobre el compañeraje que estampó la firma en el documento del frente La Neuquinidad, que fuera ratificado por la mayoría de las intendencias neuquinas rumbo a las elecciones legislativas.
“Están haciendo lo que históricamente hizo el MPN, pero Rolo está excedido en la rosca y su gestión es mala”, insistió el jefe de la bancada del Frente de Todos Neuquino, un espacio que aglutina en la Legislatura al PJ opositor y al kirchnerismo referenciado en el senador Oscar Parrilli.
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El exsecretario de Energía Darío Martínez. El peronismo es crítico a Rolando Figueroa en la Legislatura de Neuquén.
La frase deja en carne viva la atomización del panperonismo, disgregado por etapas desde las elecciones de 2023 hasta estos días. Junto a Bertoldi y Zúñiga, se observó a Lorena Barabini, actualmente a cargo de la Subsecretaría de la Mujer a nivel provincial, que ocupa el rol de secretaria de Género en el PJ neuquino.
Otra de las que saltó el espacio variopinto del gobernador fue la exintendenta de Zapala, del Frente Grande, Soledad Martínez. La zapalina ocupa el estratégico ministerio de Educación, donde le tocó enfrenarse a la poderosa organización sindical docente ATEN, hasta que se acordara la paritaria que regirá durante el año electoral.
La necesidad de abrazarse al Senado
Este año Unión Por la Patria y el gobernador Figueroa se juegan mucho en Neuquén. La alianza que se conformó para auspiciar la candidatura presidencial de Sergio Massa, que hoy tiene a sectores que históricamente se le reportaron en el frente La Neuquinidad, pretende retener las bancas de Parrilli y Silvia Sapag en la cámara alta.
La tarea no es sencilla. En ese distrito de la Patagonia, Javier Milei se impuso en las tres instancias electorales de 2023. Hasta le ganó a Massa en Añelo, la capital de Vaca Muerta, a pesar de haber eliminado -posteriormente la medida se retrotrajo- el impuesto a las ganancias que impactaba en el salario de los trabajadores del petróleo y el gas.
“Falta mucho, pero necesitamos candidatos que no voten el RIGI, la ley Bases, que no se vendan por un cargo”, dijo Martínez sobre el armado de las listas y recordó, citando el voto de la senadora Lucila Crexell: “La ley Bases salió porque Rolo quiso”.
Milei sí o Milei no
“El MPN, o Neuquinizate, es una buena máquina electoral, pero la gestión es pobre. El crecimiento en regalías, este año y el que viene, será exponencial. No podemos dejar pasar otra oportunidad”, analizó el presidente del PJ neuquino.
Para Martínez, la elección 2025 "se nacionalizará y será Milei sí o Milei no. Entonces, será La Libertad Avanza y el espacio de Rolo o el de nosotros”.
Consultado sobre la posibilidad de candidatearse para llegar al Senado, prefirió eludir la definición: “Necesitaremos a los mejores y a los más leales”.