ARDE LA INTERNA AMARILLA

Mauricio Macri vs. Patricia Bullrich: guerra por sillas clave y la marca PRO en Buenos Aires

Los coroneles del expresidente reclaman lugares en el BAPRO, el Consejo de la Magistratura y algunas comisiones. Tirones por el copyright del nombre.

La guerra entre Mauricio Macri y Patricia Bullrich por el poder en el PRO, que en Buenos Aires terminó de explotar con las rupturas de los bloques en la Legislatura y el golpe a la conducción del partido, suma otro capítulo: la batalla por sillas clave en diversos organismos y por la propiedad intelectual de la marca amarilla.

El espacio que lidera el expresidente presiona para que la tropa legislativa que responde a la ministra de Seguridad de Javier Milei liberen las butacas que en representación del PRO ocupan en el directorio del Banco Provincia, en el Consejo de la Magistratura, en la comisión bicameral de enjuiciamiento y en un par de presidencias de comisiones en la Cámara de Diputados.

Además, les pidieron a las autoridades de la cámara baja que no le permita al nuevo bloque bullrichista usar la denominación partidaria PRO Libertad.

El juego de tronos del PRO

La silla en el directorio del Banco Provincia en representación del PRO está ocupada por el exsenador bonaerense Santiago Nardelli, aunque su mandato venció el 10 de diciembre y el gobernador Axel Kicillof firmó una prórroga para su continuidad, motivo por el cual en el espacio del bahiense aseguran que ese no es un punto que esté en discusión.

Distinto es el caso del Consejo de la Magistratura, donde el diputado por la Sexta sección Fernando Compagnoni ocupa una banca. La dirigencia amarilla referenciada en Cristian Ritondo, Diego Santilli y Néstor Grindetti pide que el legislador se corra voluntariamente, aduciendo que es un espacio reservado para uno de los bloques mayoritarios, del que Compagnoni ya no forma parte desde que se fue, junto a cuatro diputadas, para armar la bancada PRO Libertad.

reunion GNL bahia blanca Dichiara diputados costa -0017.JPG
Fernando Compagnoni, del bloque PRO Libertad.

Fernando Compagnoni, del bloque PRO Libertad.

Todos somos PRO

El bullrichismo sostiene que los legisladores y legisladoras que se fueron del bloque no rompieron con el partido y que son tan afiliados como quienes piden los lugares, de manera que tienen el mismo derecho que el resto para quedarse en sus puestos. Para muestra sobra el botón de la presencia de Felicitas Beccar Varela en la asamblea partidaria realizada hace algo más de diez días en Lanús, donde se aceptaron las renuncias masivas al consejo directivo y se fijó el calendario electoral para la renovación de autoridades.

Algo parecido sucede con la comisión bicameral de enjuiciamiento representada por Florencia Retamoso, presidenta de PRO Libertad en Diputados, y con las presidencias de algunas comisiones que el macrismo está pidiendo que le devuelvan.

Como respuesta a la presión del bloque PRO, el sector de Bullrich responde que estos casos son distintos, por ejemplo, al de las vicepresidencias de los cuerpos. En el Senado, la expresidenta del PRO, Daniela Reich, dejó su lugar como autoridad de cámara cuando formó el monobloque PRO Libertad, al abandonar en soledad el bloque PRO de la cámara alta.

JJG_2555.jpg
Daniela Reich dejó la vicepresidencia del Senado tras romper con el espacio de Mauricio Macri.

Daniela Reich dejó la vicepresidencia del Senado tras romper con el espacio de Mauricio Macri.

La batalla por el nombre

La otra batalla de la guerra es la simbólica: Macri quiere que el bullrichismo se vaya definitivamente a La Libertad Avanza y para ello busca prohibir el uso de la marca PRO. Así lo determinó la asamblea de Lanús, donde el presidente del órgano, Grindetti, facultó a la junta electoral partidaria para que inicie las gestiones ante la Justicia para que el espacio disidente le quite la palabra PRO a su denominación.

Es un hecho que tiene su réplica en la Legislatura bonaerense, donde el bloque de Diputados conducido por Agustín Forchieri elevó una carta al presidente de la cámara, Alejandro Dichiara, para que reserve el uso exclusivo del nombre PRO para la bancada que lidera.

Del otro lado, aseguran que no hay antecedentes en el parlamento de que la autoridad legislativa restrinja a una fuerza el uso de determinado nombre y que, en todo caso, es un tema que deberá resolver la justicia electoral: “El presidente de la cámara no tiene la atribución para decidir eso”, dicen.

Forchieri.jpeg
Agustín Forchieri, presidente del bloque PRO.

Agustín Forchieri, presidente del bloque PRO.

En Diputados conviven bloques que comparten la palabra madre de su partido en la denominación, como los bloques UCR + Cambio Federal, y Acuerdo Cívico-UCR + GEN. Lo mismo con los monobloques Libre y Buenos Aires Libre; o PTS – Frente de Izquierda Unidad y Frente izquierda y de los trabajadores. Todo indica que el conflicto por el nombre no lo resolverá Dichiara y mediará para que se resuelva políticamente, puertas adentro del partido.

buenos aires: como queda el reparto en la legislatura tras el portazo de bullrich
Patricia Bullrich y Mauricio Macri

También te puede interesar