Las empresas nucleadas en la Cámara Argentina de la Construcción - Delegación provincia de Buenos Aires (CACBA), resaltaron que la industria de la construcción "está preparada para dinamizar el trabajo y la economía".
Actualmente, el sector se encuentra en situación de emergencia. Según se indicó, más de 100 mil puestos de trabajo están en riesgo, ya que el gobierno provincial adeuda, aproximadamente, tres mil millones de pesos, de los cuales mil millones se encuentran aprobados para el pago.
"Hemos realizado todas las gestiones pertinentes y comunicado al gobierno provincial la gravedad de la situación, respecto a la cantidad de empleos que se están perdiendo por la prolongada parálisis de las obras y la falta de pago. Esperamos se pueda resolver urgentemente, de modo que la nueva administración arranque de manera ordenada", sostuvieron desde la CACBA.
Cabe destacar que las empresas que integran la cámara son, en su mayoría, empresas pymes. En gran medida, familiares que desarrollan su actividad a lo largo de todo el territorio de la provincia, generando empleo y gran cantidad de actividades conexas en la gran mayoría de los municipios de la provincia.
Producto de esta situación y, en caso de que no se revierta, referentes del sector señalaron que no solo hay más de 100 mil puestos de trabajo en riesgo de cara a los próximos meses, sino también 400 mil de las actividades vinculadas a la construcción en peligro (como vidrieros y carpinteros, entre otros rubros).
Pese a la grave coyuntura que afronta la actividad, desde la Cámara, se mostraron optimistas respecto al futuro, en términos de lo que la industria de la construcción puede generar. "La industria de la construcción está en situación de emergencia, pero también está preparada para dinamizar el trabajo y la economía. La construcción es, junto con el comercio, el mayor generador de empleo de la provincia y, además, cuenta con un sistema de contratación rápida", sostuvieron referentes del sector.
El empleo generado por las empresas del sector contribuye directamente a la contención social y genera un impacto positivo en la sociedad. Asimismo, destacaron que “la industria de la construcción no requiere de dólares para su funcionamiento, ya que el 90% de la actividad se moviliza en pesos”.