En las elecciones presidenciales del 2015 Cambiemos obtuvo dos triunfos clave que le permitieron a Mauricio Macri acceder al sillón de Rivadavia: uno fue la provincia de Buenos Aires y el otro Córdoba. Precisamente en este último distrito -donde hoy gobierno una alianza peronista-massista- la recesión actual empezó a configurar un escenario preocupante, con modificaciones en los hábitos alimentarios básicos que tienen raíz en el alza de los precios y los embates de una era recesiva.
Estos datos los grafica un trabajo del Instituto Estadístico de la Defensoría del Pueblo de la provincia al que accedió Letra P, que afirma que hay bajas sustanciales en la compra de carne vacuna y lácteos, y reemplazo por harina y azúcares; una situación que golpea sobre todo a las familias que cuentan con ingresos por debajo de los $16.000. Cabe destacar que la inflación y la recesión actuales se suman a una tendencia de reemplazo que venía ya configurándose en 2015.
En el detalle, “Carne Vacuna” y “Lácteos” “constituyen los principales alimentos que los cordobeses han dejado de consumir en un 69,81% y 45,96% respectivamente. En menor medida han disminuido también el consumo de las “Frutas y Verduras”, “Yerba” y “Pollo”. Y si se observa el gasto global, 8 de cada 10 consultados expresó que en el último año el gasto destinado a los alimentos en relación a los ingresos del hogar aumentó. Sólo el 6,89% expresaron que actualmente el porcentaje de su ingreso destinado a la compra de alimentos disminuyó con respecto al año anterior.
Este tipo de análisis se vienen haciendo en Córdoba desde agosto del año 2014 y para llevar a cabo este análisis el organismo realizó una encuesta, para lo cual se tomaron 599 casos representativos en las inmediaciones de seis supermercados ubicados en diferentes sectores geográficos de la Ciudad, teniendo en cuenta los niveles socioeconómicos. Se utilizó un muestreo aleatorio con un nivel de confianza del 95% y un error muestral de +/- 5%.
En la provincia gobernada por Juan Schiaretti, el 78,73% de los ciudadanos consultados afirmó que el aumento de precios de los alimentos constituyó un factor determinante que obligó a modificar sus hábitos de consumo y por lo tanto cambiar su dieta diaria.
Por otra parte, de las personas que manifestaron cambios en su dieta a causa de los incrementos de precios, el 57,50% respondió que reemplazó esos alimentos por otros. Si consideramos los datos obtenidos en 2015 (51,36%), este porcentaje se incrementó aproximadamente un 6%.
De los encuestados que declararon haber dejado de comprar o que compran menos Carne Vacuna, un 64,67% expresó que lo sustituyó principalmente por Pollo. Otras suplencias, en porcentajes menores, fueron por Cerdo, Pescado y Verduras.
UNO POR UNO EN 2016. En el caso de la carne vacuna, la merma en la compra fue de un 70% con respecto a 2015; “la causa más notoria expresada de esta disminución fue el aumento de precios, que trae como consecuencia la pérdida de poder adquisitivo”.
En cuanto al consumo de Pollo en 2016, se elevó en un 49,75%. “Esto se debió fundamentalmente a que, como nos comentaron los cordobeses, hubo una inclinación por la compra de este tipo de carne debido al bajo costo respecto a la carne vacuna, constituyendo así su principal reemplazo”, puntualizaron los autores del trabajo.
En “Lácteos” hubo una baja en su adquisición del 47,74%; siendo los segundos alimentos más reemplazados después de la Carne Vacuna. Como contraparte, sólo un 6,20% manifestó que su consumo en el último año se incrementó. Todo lo que se dejó de consumir lo capitalizó el rubro farináceos. Harinas tuvo un aumento del 15,94% ya que las mismas son un alimento sustituto elegido por los consultados. El 46,48% manifestó no haber experimentado cambios con respecto al año anterior. Al consultarles por las causas de disminución (27,18%), en su mayoría argumentaron haber reducido la ingesta de harinas por razones de salud.
Por último se examinó el consumo en el rubro “Frutas y Verduras”; el mismo se mantuvo constante con un 43,22%. Se puede apreciar también, una importante baja en estos alimentos reflejada por el 29,31%; de este modo, la quita de Frutas y Verduras dificulta el acceso a una dieta equilibrada y por lo tanto, trae aparejadas repercusiones negativas.
Según la Defensoría del Pueblo de Córdoba, las principales estrategias utilizadas por los cordobeses para ahorrar son similares a las de 2015, destacándose: buscar ofertas (80,13%). Otros métodos implementados fueron: sustituir primeras por segundas marcas, buscar precios en varios establecimientos, aprovechar descuentos con tarjetas de crédito / débito, y realizar la compra del mes en mayoristas.