El intendente de Vicente López, Jorge Macri, se encuentra instalado en la costa bonaerense. Desde allí se encarga de asistir a los nuevos intendentes del PRO que ganaron en las últimas elecciones. Sin lugar en el gabinete bonaerense, oficia de “articulador” con jefes comunales.
Macri quedó fuera del armado político de la gobernadora María Eugenia Vidal. Si bien sonó en su momento como jefe de gabinete, ese lugar finalmente fue para un leal de la mandataria como Federico Salvai. En este contexto, Jorge Macri sale a mostrarse como referente de los intendentes PRO.
Esta semana estuvo en Pinamar. Allí gobierna el intendente más joven de la provincia, Martín Yeza. En la exclusiva localidad costera ambos jefes comunales firmaron un convenio de promoción turística conjunta.
También estuvo en la delicada Mar del Plata. Su intendente, Carlos Arroyo, lidia con un alto nivel de inseguridad y un conflicto en puerta por la cesantía de casi 400 contratos de empleados públicos. Macri fue a llevarle tranquilidad y una foto de gestión.
Pese a que tuvo un rol protagónico durante la campaña de María Eugenia Vidal (era el jefe de campaña), Jorge Macri no tuvo el lugar que esperaba en la distribución del poder bonaerense. Vidal optó rodearse de los suyos. Además de Salvai, también aparecen el Subsecretario de Gobierno y Asuntos Municipales, Alex Campbell o Manuel Mosca como vicepresidente de la cámara de Diputados bonaerense como referentes puros del “vidalismo”.