También Cristina, condenó la situación que el presidente boliviano Evo Morales tuvo que vivir días atrás en su paso por Europa y que “pudo haber pasado a cualquiera de nosotros”.
Además sostuvo que “el único elemento para profundizar la democratización es la integración”, es por ello que pidió a los restantes mandatarios “abrir una nueva agenda” para afrontar los “cambios que hay en el mundo”.
“La situación de este mundo nos debe hacer repensar nuevas estrategias que contengan como meta nuestro propio mercado y su integración” reivindicó Cristina Kirchner.
Denunció que “el mundo intenta reprimarizar nuestras exportaciones y recuperar los términos de intercambio de otrora”; es por ello que pidió: “No escuchemos cantos de sirena, no son sirenas. Están disfrazados, quieren volver a vernos separados y divididos, porque así siempre les fue mucho más fácil”.
A Cristina la acompañaron la ministra de Industria, Débora Giorgi; el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini; el secretario de Comercio, Guillermo Moreno; el virtual viceministro de Economía, Axel Kicillof; el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, y el embajador argentino en Brasil, Luis María Kreckler. Además del canciller Héctor Timerman.