Las manifestaciones comenzaron en forma pacífica, pero se radicalizaron violentamente en las cuatro principales ciudades del país: Río de Janeiro, San Pablo, Belo Horizonte y Brasilia.
En la capital la manifestación arrastró a las calles a unas 7.000 personas que llegaron al Congreso Nacional e intentaron invadirlo.
En San Pablo, donde estallaron las primeras manifestaciones a raíz de un aumento del costo del transporte, la manifestación convocó a unas 65.000 personas.
La demostración se desarrolló en forma pacífica hasta los últimos momentos, cuando un grupo de manifestantes intentó invadir la sede de la gobernación provincial y llegó a querer forzar la puerta principal del Palacio Bandeirantes, sin conseguirlo.
La quinta marcha realizada en San Pablo se celebró después de que el principal grupo convocante, el Movimiento Passe Livre, llegara a un acuerdo con las autoridades, que se comprometieron a no usar balas de goma como en las movilizaciones anteriores, cuando decenas de personas resultaron heridas.
A las consignas vinculadas directamente con las reivindicaciones de la marcha, se sumaron cánticos que aludían a la violencia policial perpetrada durante la marcha anterior, el jueves pasado.
Los movimientos sociales anunciaron nuevas manifestaciones y afirmaron que “no dejarán las calles” hasta que se revoque el aumento.
“El destino es claro, único, objetivo y específico: revocar el aumento”, anunció el movimiento Passe Livre de San Pablo, una agrupación nacida en las universidades y que ha encabezado las protestas.
El secretario general de la presidencia brasileña, Gilberto Carvalho, dijo que el gobierno y la presidenta Dilma Rousseff están “preocupados por las manifestaciones de protesta que atraviesa el país”, pero pidió “no hacer especulaciones políticas y sacar conclusiones apresuradas”.
Carvalho anunció que el gobierno dialogará con los movimientos de protesta pero añadió que “no faltará la ley y el orden, aunque de manera pacífica y negociada”.
“La democracia es así, la dictadura es fácil”, añadió el funcionario.