En este sentido a la expectativa que siempre genera un discurso oficial de Scioli, este año se le suma el condimento del contexto en el que el mandatario bonaerense tendrá que pronunciar sus palabras: la provincia está parada por todos lados. Docentes, estatales y médicos se encuentran en pleno plan de lucha y acusan al ejecutivo “de falta de voluntad política”.
De este modo, si bién se estima que el tono del gobernador siga en la misma línea conciliadora que lo caracteriza, se espera que haga referencia directa a estas negociaciones que por ahora están truncas y que, entre otras cosas, tienen a tres millones de alumnos sin clases.
Según fuentes cercanas al gabinete bonaerense, el eje medular del discurso se basará en la agenda legislativa 2012, y en los proyectos que el ejecutivo envió a ambas cámaras y los que estaría por enviar.
Así las cosas , se especula que repasará las iniciativas de la policía comunal y judicial, la ley de adopción, la reforma de la Ley Orgánica de Municipios y Regionalización , y el juicio por jurados , entre los temas más destacados.
Pero además de estar ultimando los detalles el discurso que leerá Scioli en la ceremonia del jueves, se pudo saber que se está trabajando intensamente en la seguridad del recinto, con el recuerdo fresco de los escandalosos incidentes que se vivieron en la ceremonia de asunción en diciembre pasado.
En este sentido se dispuso reservar palcos para militantes “k” y de la Cámpora por un lado y para los jóvenes de naranja que apoyan al gobernador por el otro, para que todo se desarrolle en un clima de pacífica convivencia y sin controles policiales.
Cabe recordar que el 12 de diciembre en el acto de asunción y juramento de Daniel Scioli, un grupo de jóvenes camporitas seguidores del vice gobernador, Gabriel Mariotto, se enfrentaron con la policía cuando intentaban ingresar al recinto dejando un saldo de dos militantes heridos y costos políticos e institucionales que todavía están latentes. Mientras la Justicia abría una investigación de oficio, el Ejecutivo suspendió de sus funciones e inició un sumario a seis agentes de Infantería que participaron de la represión y, siete días después, suspendió en el cargo e incluyó en ese sumario al integrante de la cúpula policial responsable del área de “Custodia de Objetivos Fijos”, comisario Sergio Ochoa.