Legislatura BA

Sin acuerdos cerrados, Cambiemos apuesta a tener el Presupuesto el miércoles 21

El oficialismo hará el segundo intento luego de la frustración de esta semana. Esta llamada la sesión en el Senado y en Diputados pero todavía no se resuelve la vicepresidencia en la Cámara baja.

La Legislatura planea ponerse en órbita la semana que viene para votar el mismo día en el Senado y en Diputados el proyecto del Presupuesto provincial 2017. Cambiemos dice que los intendentes del Grupo Esmeralda les aseguran las manos necesarias para tener el endeudamiento. El sector peronista que apuesta a la unidad en la votación avisa que “hasta que no arreglen autoridades de Cámara y presupuesto no hay presupuesto de la Provincia”. De dónde pueden llegar a salir los votos. 
 
La gobernadora provincial María Eugenia Vidal aspira tener aprobado el Presupuesto provincial la semana que viene. Entre el jueves último y este viernes se oficializó la convocatoria para sesionar el 21 de diciembre. Según el oficialismo, intendentes peronistas que estuvieron al frente de las negociaciones les aseguran la presencia de algunos diputados para tener quórum. A cambio, consiguieron el fondo de endeudamiento para Infraestructura y la Defensoría del Pueblo que será para un ex diputado ahora anclado en el Grupo Esmeralda: Guido Lorenzino. Ese espacio de intendentes con anclaje en dos de los tres bloques peronistas le confió a Cambiemos que algunos diputados de esas bancadas bajarán a sesionar.  
 
La traba y uno de los motivos por lo que hasta el momento no se votó el Presupuesto provincial fue la designación en la vicepresidencia de la Cámara de Diputados. En el esquema de enroque de autoridades, esa silla le correspondía al Frente Renovador de Sergio Massa que durante todo el 2016 presidió la Cámara en la figura de Jorge Sarghini. Esta vez los tres bloques que tiene el peronismo/kirchnerismo parecen estar amalgamados en el reclamo a ese lugar: ostentan ser 36 legisladores. Cambiemos apura a quebrarlos y un sector del peronismo estaría listo para ceder.
 
No lo lograron esta semana y ahora el oficialismo va por la revancha. Para conseguir el endeudamiento, Cambiemos necesita de dos votos peronistas en el Senado y siete en Diputados; todo sumado a los ya acordados acompañamientos del massismo, el Gen y los bloques aliados. 
 
El lunes pasado, diputados de Cambiemos salieron a apurar al peronismo al decir que el presupuesto “está en condiciones de ser tratado la próxima sesión”; algo que finalmente no ocurrió. El titular de la comisión de Presupuesto, el diputado oficialista Marcelo Daletto, contó que “luego del trabajo conjunto con intendentes y legisladores de todos los partidos políticos, no vemos la necesidad de demorar el tratamiento del presupuesto 2017”. Un optimismo que no logró traducirse en los hechos. 
 
La figura de Florencio Randazzo también está en juego –desde el subsuelo- en esta contienda netamente política. Es que la negociación ya no pasa por números o fondos. Sino por poder político y control de la Cámara baja. Además se condiciona a la interna del peronismo. Si el ex ministro del Interior consigue sostener la unidad de los legisladores todos y arrebatarle la vicepresidencia de Diputados al massismo, cuenta con una buena plataforma propia para salir a la superficie y apostar de lleno al 2017 como el garante de la unidad en lo que serán las elecciones legislativas. 

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