Inspirada en la doctrina papal, reivindica el Diálogo Argentino de 2001. Impronta social y educativa y apertura a consensos sobre políticas públicas.
Pacto de Mayo en el diálogo de Javier Milei con el papa Francisco
Vatican MediaNo son los diez puntos del Pacto de Mayo de la convocatoria del presidente Javier Milei a los gobernadores ni los siete ítems del bonaerense Axel Kicillof. Tampoco, otras iniciativas que fueron surgiendo. Son los diez mandamientos inspirados en la doctrina del papa Francisco que la Iglesia sugiere para consensuar políticas públicas, más allá de las urgencias.
Fuentes eclesiásticas consultadas por Letra P valoraron el convite que el primer mandatario hizo a los mandatarios provinciales para el 25 de mayo en Córdoba, pero lamentaron que ese pacto propuesto para "garantizar el bienestar de los argentinos" sea a libro cerrado y condicionado a la aprobación de la ley ómnibus, que en la primera semana de febrero naufragó en el recinto de la Cámara de Diputados por el rechazo de parte de la oposición.
Referentes eclesiásticos y laicos también objetan que el decálogo presidencial se circunscriba a lo económico y no incluya otros caminos para empezar a salir de una coyuntura de crisis permanente y agravada en los últimos meses, advierten, por el plan de ajuste y otras medidas económicas adoptadas por la administración de Milei y el ministro Toto Caputo.
Ante la aplicación de la motosierra y la licuadora libertaria, obispos sacan a relucir documentos episcopales en línea con la doctrina bergogliana que ponen el acento en otras dos variables: un pacto educativo “urgente y necesario” y otro social, con iniciativas para combatir la pobreza, que roza el 60%, y la indigencia, que supera el 15%, según datos el Observatorio de la Universidad Católica Argentina (UCA).
El pacto que la Iglesia propone a las autoridades libertarias ya está escrito. Fue redactado por la Comisión Nacional de Justicia y Paz en la víspera de la conmemoración patria de mayo del año pasado, antes de las instancias electorales y por encargo de los obispos a la mesa política conformada por personas laicas católicas encabezadas por Humberto Podetti.
El decálogo resume documentos del magisterio social y político de Jorge Bergoglio y tiene el espíritu de la mesa del Diálogo Argentino, aquella instancia convocada por la Conferencia Episcopal Argentina y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en plena crisis de 2001-2002 por la salida precipitada de Fernando de la Rúa y cuyas líneas base instrumentó con posterioridad el presidente provisional Eduardo Duhalde.
“Faltaría pulir el texto e incorporarles algunos de los planteos que la comisión hizo a mediados de enero frente a la imposición del DNU y la ley ómnibus”, dijo a Letra P una persona que participa de esa instancia deliberativa eclesial. La fuente hacía referencia al documento en el que reclamaban alternativas “superadoras” para aquellas medidas que “afectan a los más débiles, los más pobres, las infancias, los jubilados, las personas con discapacidad”. Petición que, en la práctica, no fue escuchada por autoridades políticas.
El documento eclesial, que podría ser reformulado la semana próxima durante una reunión de la misa chica episcopal en Buenos Aires, aporta pautas básicas para acordar coincidencias y construir consensos en formato de decálogo.