Martín Menem (LLA) y Cristian Ritondo (PRO), figuras decisivas para Javier Milei en Diputados.
Javier Milei había definido este miércoles recortar los fondos que reciben los partidos políticos para desviarlos a las universidades nacionales. El anuncio se iba a realizar en el Salón Delia Parodi de la Cámara de Diputados, con autoridades legislativas, pero a último momento se suspendió porque el PRO puso el grito en el cielo y volvió a peligrar su condición de aliado. El partido amarillo tampoco está de acuerdo con eliminar las primarias, la otra propuesta que tiene el Presidente para generar más fondos.
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"No es que el PRO no estaba al tanto, pero sí es verdad que pidieron un tiempo más para que la medida se estudie en el bloque", confirmaron a Letra P fuentes del oficialismo, donde este miércoles abundaba la incertidumbre por la fallida conferencia, que obligó a desmontar los equipos de cámaras que habían llegado al palacio horas antes del anuncio, previsto para las 17.30.
No era un horario casual: en ese momento comenzaba el plenario de comisiones de Asuntos Constitucionales y Peticiones, Poderes y Reglamentos, en el que se dictaminaron proyectos para restringir el uso de decretos de necesidad y urgencia. Si bien algunas versiones oficiales indicaban que el despido de la canciller Diana Mondino había sido la causal de la suspensión, la tensión con el PRO fue el verdadero motivo.
Fuentes del bloque amarillo, conducido por Cristian Ritondo, confirmaron a este medio que nunca fueron consultados por la conferencia y cuando se enteraron hicieron saber su enojo. Un diputado de La Libertad Avanza (LLA) que fue a participar del anuncio y se quedó con las ganas también confirmó la misma versión. "Esto lo armó y lo bajó Santiago Caputo. Y el problema es el noviazgo con el PRO", señaló.
La plata de Javier Milei
La partida para las universidades que figura en el Presupuesto 2025 es de 3,8 billones de pesos. El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) pide 7.2 billones de pesos y la oposición está dispuesta a pedir al menos un aumento inferior.
Según el subsecretario de políticas universitarias, Alejandro Álvarez, los rectores exigen fondos expansivos, que toman en cuenta actividades que aún no tienen garantizadas.
De todos modos, Milei aceptó que tiene que aumentar la inversión en las casas de altos estudios y empezó a evaluar alternativas para correr el arco de la oposición. "El mensaje, en cualquier caso, será que le sacamos plata a la política", explicaron en LLA.
Una primera alternativa era proponer eliminar las primarias, un proyecto del Gobierno que quedó trunco porque no tiene respaldo del PRO, que necesita tener esa contienda habilitada por si no logra acordar listas comunes con LLA. Votar una sola vez en 2025 permitiría un ahorro de 50 mil millones de pesos, una suma módica. Milei insistirá, pero sabe que no están los votos.
Desechada esa opción, en el Gobierno surgió la idea de extraer recursos del fondo partidario permanente, una de las cajas con las que se financian los partidos políticos, que el año pasado fue de 1.162.547.211de pesos. Sería el primer paso para exigir un financiamiento privado pleno de las fuerzas políticas, uno de los capítulos de la versión original de la ley Bases, que no pasó el filtro de la oposición dialoguista.
El PRO, que siempre respaldó los aportes privados en las campañas, no llegó a pronunciarse, tal vez porque necesite recalcular sus nuevos intereses en esta nueva etapa de aliado oficialista. Por eso la conferencia fue suspendida y no tiene fecha de reprogramación.
La tensión con Mauricio Macri
El fallido anuncio sobre el presupuesto universitario no hace más que confirmar la tensión permanente entre Milei y Mauricio Macri por la agenda legislativa, que tiene como horizonte el armado electoral para 2025, coordinado por Karina Milei. El martes el expresidente fue a la reunión del bloque de Diputados y aseguró que el economista es el más interesado en la confluencia entre LLA y el PRO, una forma sutil de ratificar que no mejoró su relación con la secretaria general.
En esa reunión, además, Macri confirmó que no hay una posición tomada respecto a la reforma del DNU, que Milei trata de bloquear, por ahora sin ayuda. El PRO no firmó el dictamen de rechazo que presentó el oficialismo.
En cuanto al Presupuesto, de palabra, Macri se garantizó el aporte de la coparticipación para la Ciudad y pide fondos para las provincias y municipios con gobiernos amarillos, como Entre Ríos y Chubut. También reclama un aumento para los jubilados, rechazado por el Gobierno.
Sin todas esas demandas resueltas, Ritondo tampoco quería mirar un anuncio oficial del Presupuesto y presionó para bajar la conferencia. El juego a las escondidas del Gobierno empezó el lunes, cuando suspendió hasta nuevo aviso la mesa política que se reúne en la Casa Rosada, donde el PRO tiene sillas aseguradas. Tenía una sorpresa preparada.
El proyecto de Presupuesto, en tanto, no se debatió esta semana en comisiones y recién se trataría en 15 días, con la expectativa oficialista de llevarlo al recinto antes de fin de noviembre y que el Senado lo sancione en diciembre. La negociación está muy verde.
