El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, usó el discurso de apertura de sesiones en la Legislatura de Córdoba para reivindicar el "modelo cordobés" y ratificar el rumbo de gobierno marcando las distancias con el presidente Javier Milei.
Llaryora: "Córdoba no se arrodilla ni tiene miedo"
En su discurso que abrió la sesiones ordinarias en la Legislatura de Córdoba, Martín Llaryora reivindicó el rol de Estado provincia en los “tiempos de crisis” que vive la Argentina a la vez que aseguró que su gestión crecerá a partir de los valores del modelo cordobés que construyeron sus antecesores, Juan Schiaretti y José Manuel de la Sota.
“El Partido Cordobés impulsa un concepto amplio que busca mejorar la calidad de vida de los vecinos”, dijo el gobernador y lanzó un pedido a la oposición para que “con la voluntad de sumar” se fortalezca el diálogo “en beneficio de los cordobeses”.
“Estamos convencidos que escuchando las perspectivas de los demás podemos enfrentar mejor estos momentos difíciles”, aseguró el gobernador. “Necesitamos estar todos un poco más juntos”, agregó.
“En medio de esta crisis económica, Córdoba va a tener un rostro cada vez más humano”, dijo el gobernador que pidió continuar defendiendo los “valores del modelo cordobés”. “Seguiremos defendiendo el diálogo, la tolerancia, el respeto a las instituciones y a la libertad de prensa, y la articulación público-privada para generar más trabajo, porque para nosotros gobernar es generar trabajo”, afirmó.
“Estos son los valores que sustentan al modelo cordobés. Córdoba no se arrodilla ni tiene miedo. De esta crisis vamos a salir juntos y para adelante”, dijo al final de su mensaje.