En una continuidad del mensaje que vaticinaba el despegue de la economía para "el segundo semestre" de 2016, el presidente Mauricio Macri protagonizó este viernes un nuevo capítulo de lo que será el eje comunicacional del Gobierno de cara a la segunda mitad de su mandato: ratificó que “lo peor ya pasó” y anunció el comienzo de "una nueva etapa" que definió con una metáfora: "El vaso medio lleno". Frente al gabinete ampliado reunido en el CCK, convocó a su tropa a defender los logros conseguidos en los dos primeros años de gestión y a admitir que "todavía falta mucho" para cumplir las metas prometidas, pero ratificando la promesa de que "la economía va bien" y "seguirá creciendo" en los dos últimos años de su mandato.
Con una arenga motivacional para más de 800 funcionarios –ministros, secretarios, subsecretarios, directores, legisladores y asesores del gobierno de Cambiemos- reunidos en el Salón Ballena del Centro Cultural Kirchner (CCK), Macri inauguró así un nuevo discurso en el que llamó a los suyos a contar "las cosas que se hicieron bien”, admitir que “todavía falta mucho” y destacar las “bases” de la economía que permitirán “crecer en los próximos años de manera sostenida”. En esa línea, insistió en relativizar las señales de una realidad contraria que percibe la sociedad.
“Así como Putín tiene ese misil que tiene tan preocupado al mundo, nosotros tenemos un misil que es el turismo y es lo que le va a dar una gran salida a la Argentina”, dijo Macri, según pudo reconstruir Letra P, ante un auditorio Ballena repleto de funcionarios, en una comparación con el poderoso presidente de Rusia, Vladimir Putín, y sus últimas muestras de poderío nuclear.
Solo sobre el escenario, con un fondo oscuro y un atril con un vaso de agua lleno, Macri cerró el encuentro anunciando ante su tropa que “arranca una nueva etapa”.
Macri brindó así las primeras señales del discurso que impulsará el Gobierno de cara al segundo tramo de la gestión con la mira puesta en el camino que deberá recorrer la alianza gobernante si quiere conseguir la reelección en 2019.
“Estamos en la etapa donde el vaso hoy está medio lleno”, continuó y pidió a los funcionarios: "No nos dejemos cooptar por los que dicen que el vaso está medio vacío”.
“Podemos hablar del medio vaso vacío, pero previamente debemos hablar de que el vaso está medio lleno, de las cosas que se hicieron”, relató a Letra P un funcionario con despacho en Casa Rosada.
El argumento lanzado por Macri para definir la segunda etapa de su mandato, en la que abandonó los reproches a su antecesora kirchnerista por “la pesada herencia”, tiene que ver con destacar que “no está todo mal, hay muchas cosas que se hicieron y están bien” y reconocer que ”todavía falta mucho” para alcanzar las metas prometidas al llegar al poder en diciembre de 2015.
Tras ratificar por segundo día consecutivo el rumbo económico que volvió a definir, en palabras de Dujovne, como “el gradualismo”, Macri dio letra a su tropa para responder a las críticas opositoras sobre el rumbo de la economía: “Si solo querés arrancar por las cosas que faltan y no reconocés lo que se hizo, es muy difícil”.
El encuentro se desarrolló en un marco de tensión en los alrededores del CCK, que amaneció fuertemente custodiado por efectivos de la Policía Federal, Gendarmería y la Policía de la Ciudad, que portaban cascos, escudos y perros, ante una protesta de una veintena de manifestantes del gremio APOC y trabajadores de la ANSES que protestaban en la puerta contra despidos y ajuste a los jubilados.
Macri fue el último en hablar, luego de las exposiciones de los ministros Nicolás Dujovne (Hacienda), Gustavo Santos (Turismo) y Marcos Peña (jefe de Gabinete), según confirmó una alta fuente de la Casa Rosada a Letra P.
En las primeras filas se sentaron el cuestionado jefe de la AFI, Gustavo Arribas, la vicepresidenta Gabriela Michetti, los titulares de Diputados y del Senado, Emilio Monzó y Federico Pinedo; la gobernadora María Eugenia Vidal, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; legisladores nacionales, ministros bonaerenses e intendentes del oficialismo, como Diego Valenzuela(Tres de Febrero) y Jorge Nedela (Berisso).
El primero en hablar ante el auditorio Ballena repleto fue Nicolás Dujovne. El ministro de Hacienda fue el encargado de “presentar los datos duros de la economía”, dijeron fuentes que asistieron al encuentro. Ratificó “las metas de inflación de 15 por ciento” para este año, habló de mantener las metas fiscales y defendió el nivel de endeudamiento, que lo puso por debajo de "muchos países de la región”, según supo este medio.
Cerca de Macri volvieron a rechazar las críticas –que expuso la oposición en el Congreso y repercutieron en las redes sociales- ante frases como “crecimiento invisible” y “los salarios le ganaron a la inflación”, que usó el Presidente para ratificar el rumbo ante la Asamblea legislativa.
Un funcionario definió la charla de Macri como “motivacional”. Instó a los funcionarios a “seguir trabajando en equipo, como lo venimos haciendo”.
“Logramos mucho, pero falta todavía mucho. No hay que bajar los brazos ni relajarse, sigamos jugando en equipo”, fue la arenga del Presidente a su tropa.
Antes, otro discurso calificado como “muy motivante” por los presentes fue el que brindó el ministro Santos, que dio "datos” de la “revolución del Turismo” que anunció Macri en el Congreso, como uno de los ejes de la economía de “servicios” que propone el Gobierno.
“Ratificó 100 por ciento lo que dijo ante la Asamblea”, relató otra fuente a Letra P sobre el discurso de Macri. Habrá que esperar al próximo capítulo.
