La estructura bruerista se movilizó en masa hasta el ahora predio de la universidad. Con remeras y banderas verdes que sólo decían Bruera La Plata, los micros llegaron temprano y los brueristas se ubicaron en un principio detrás y sobre un costado del corralito montado para la prensa. Toda la logística de cánticos que sólo coreaba “Olé olé olé olé, Pablo Pablo” fue orquestada por Mariano Bruera, el hermano mayor del intendente, quien maneja las cooperativas y se encarga de garantizarle a su hermano un buen caudal de gente en cada acto que participa.
Pero los Bruera no estaban sólo, también el intendente de Ensenada, Mario Secco llevó a los suyos que se ubicaron al lado de la gente de Bruera. En el otro extremo del predio se ubicaron las agrupaciones más referenciadas con el kirchernismo, como La Cámpora, la JP, y el MUP además de algunas organizaciones estudiantiles que responden directamente al FpV de paladar negro.
Al iniciar el acto, mientras el director del Hospital Español, leía una carta sobre lo que había vivido la institución por culpa de la inundación, un grupo que respondía a la gente de Bruera saltó las vallas y, con una gran bandera, quiso ubicarse en el espacio reservado para el personal vinculado a la Universidad, tapándole la visión a la gente de Mario Secco. Allí comenzaron los primeros forcejeos y luego de algunos empujones y gritos decidieron enrollar la bandera.
Pero mientras el cruce verbal y algunos palazos eran cada vez más notorios desde el escenario el intendente platense, que estaba sentado a un costado en primera fila, hizo un gesto: ordenó a sus seguidores “terminar”. Antes de miró su celular.
Sobre el escenario, Bruera no corrió con mejor suerte. La locutora oficial, Natalia Paratore, nunca lo mencionó. SÍ en cambio al ensenadense Mario Secco o al Gobernador Daniel Scioli. El momento más incómodo fue cuando a la mandataria le hicieron entrega del premio Rodolfo Walsh. Una mención que entrega la Facultad de Periodismo de la UNLP que es conducida por Florencia Saintout, actual concejala platense dentro del bloque Frente para la Victoria Nacional y Popular. Un espacio k de oposición a la conducción platense.
Saintout que también estaba en el escenario principal, fue presentada, se paró y se fundió en un abrazo con Cristina. Pablo Bruera seguía sentado y apenas aplaudió. La gente que responde al intendente en ese momento volvió a cantar por el Jefe Comunal, como lo hicieron durante todo el acto.
Al momento de tomar la palabra, cuando la presidenta hizo mención a las inundaciones volvió a retar implícitamente al líder platense. Dijo sobre las obras que se harán: “queremos que los vecinos controlen para que las cosas se hagan bien”, explicando que de además la cuestión climatológica “puede haber otras causas” a la hora de pensar en la inundación. Nunca nombró al intendente ni al municipio.
El acto terminó y Cristina se paró. Fue a saludar a la gente que se acercaba hasta el escenario. Los funcionarios nacionales, se abrazaban, y bajan; Pablo Bruera sólo intercambió unas palabras con Daniel Scioli y se quedó parado. Cristina le pasó por al lado y terminó fotografiándose con un bebe al lado de Florencia Saintout antes de abandonar completamente el escenario. Bruera dio media vuelta y se fue en soledad.