A menos de 24 horas de la última sesión ordinaria del año, en donde se iba a poner en consideración un expediente que habilita la construcción de un shopping en las inmediaciones a Ferro, el oficialismo duda en exponer el tema en el recinto.
Según comentaron fuentes parlamentarias a Letra P, el PRO analiza si tratar este jueves en el recinto la iniciativa que beneficia a la empresa constructora IRSA porque, a último momento, comenzaron a resquebrajarse los acuerdos con el bloque SUMA + y con Confianza Pública.
“Hoy no tenemos los votos. No nos vamos a arriesgar a poner en debate un tema que sabemos que la oposición no quiere acompañar”, advirtió un legislador del macrismo a este medio.
El oficialismo porteño redactó el proyecto y aspiraba a conseguir los votos de un sector de UNEN y del bloque de Graciela Ocaña para superar los 31 necesarios para darle luz verde al polémico expediente que deambula por la Legislatura porteña desde el año 2008.
Concretamente, el proyecto impulsado por el Ejecutivo de la Ciudad hace referencia a un terreno próximo al estadio del Club Ferrocarril Oeste que antiguamente pertenecía a la institución deportiva pero que hace más de una década es propiedad de la empresa constructora IRSA, presidida por Eduardo Elsztain y de aceitadas relaciones con el Gobierno de Mauricio Macri y Cristina Fernández de Kirchner.
La iniciativa plantea modificar el destino de esas tierras y eso daría vía libre a la construcción de un centro comercial, a pesar de que la firma ya tiene más de media docena de esos emprendimientos en la Ciudad de Buenos Aires.
Según trascendió, en la mente de Elsztain está la idea de montar un enorme centro comercial de más de diez pisos de altura, 40 locales como mínimo, cines y un estacionamiento de 50.000 metros cuadrados que brindaría “seguridad” a los vecinos de la zona norte del barrio porteño de Caballito.
Desde hace una semana en el bloque PRO se ufanaban de contar con el apoyo de los radicales de SUMA + y de Confianza Pública pero en los últimos días ese respaldo parecería que se comenzó a diluir. Sin embargo, el expediente fue tratado este martes en la reunión de Pre-Labor Parlamentaria por lo que resta saber si este miércoles se confirmaría su tratamiento para la sesión del jueves.
A diferencia de las otras tres oportunidades en las que el bloque oficialista buscó sancionar este proyecto, esta vez el expediente contaba con despacho de la Comisión de Planeamiento Urbano. En 2008, 2011 y 2013 el shopping de Caballito fue propuesto sobre tablas y la oposición negó el tratamiento.
En todas esas instancias, como durante este año, los bloques opositores cuestionaron la medida al igual que los comerciantes y la CAME, que pidió archivar el expediente porque la edificación de un centro comercial de esas características perjudicaría a los medianos comerciantes de la zona. Por otra parte, un grupo de vecinos continúa reclamando un informe de impacto ambiental, mientras que otro sector reclama la llegada del shopping a Caballito porque, argumentan, otorgaría mayor seguridad.
Hasta ahora, en el bloque oficialista informaron que los ánimos están caídos por no cumplir con el deseo del líder del PRO, Mauricio Macri. No obstante, el día clave para saber si la iniciativa entrará en la sesión del 11 será este miércoles, cuando en la reunión de Labor Parlamentaria se notifique el temario completo del jueves.
El proyecto de ley impulsado por el Gobierno porteño es de doble lectura. Para su aprobación total es necesario una sanción parcial, luego una audiencia pública y, finalmente, una sanción definitiva en el recinto. Es decir, por más que el macrismo se apure, el proyecto que beneficia enteramente a IRSA no podrá tener aprobación hasta el año que viene porque el período de sesiones ordinarias finaliza el 15 de diciembre.