En una de las categorías que generaba mayor interés por la importancia para la nueva gestión de contar con la mayoría en la Cámara de Diputados, por lo cerrado de la pelea pero, también, porque significaba un examen definitivo para la administración de Omar Perotti, la socialista Clara García se impuso con claridad al actual gobernador y consiguió para Unidos para Cambiar Santa Fe 28 de las 50 bancas en juego.
Con el 99,70% de los votos escrutados, García alcanzaba 570.411 votos (33,05%) contra 481.016 de Perotti (27,87%). Tercera quedaba Amalia Granata con otra elección destacada: cosechó 343.813 votos (19,92%). Cuarto se ubicaba Carlos Del Frade, con 131.445 votos (7,62%), y quinto Juan Argañaraz, de Viva la Libertad, con 128.307 (7,43%). En sexto lugar entraba Rubén Giustiniani, que alcanzó los 70.741 (4,10%).
Este domingo se renovó la totalidad de la Cámara. Unidos se quedó con 28 escaños, el peronismo con diez, el espacio de Granata obtuvo siete, el Frente Amplio por la Soberanía tres y Viva la Libertad, dos.
La dirigente socialista construyó la victoriacomo una orfebre. Cuando todo indicaba que sería la candidata de su partido para la gobernación, sobre la hora trabajó en un enroque que sorprendió a todos. Acordó con Mónica Fein para que ella compitiera en la interna con Maximiliano Pullaro y Carolina Losada y se puso como cabeza de lista de su espacio.
Fue el primer paso. El segundo, contener en el primer turno la ola de votos de Pullaro: por escaso margen le ganó a José Corral, el candidato radical.
“Ya dije todo de Perotti. Ahora lo dijo la gente. El resultado tiene que ver no sólo con una mala gestión, sino, también, con una mala relación en política, sin diálogo, sin apertura, sin escucha, con mucha discrecionalidad”, evaluó la diputada en diálogo con Letra P cuando la noche de festejos se apagaba y ella se marcha de Puerto Norte, donde se montó el comando de campaña de Unidos. En el estacionamiento la aguardaba Fein para continuar la celebración en otro lado.
Pullaro contará con un respaldo que es clave. Antonio Bonfatti, en 2011, y el propio Perotti gobernaron sin mayoría en Diputados.
El gobernador, que no contaba con la posibilidad de ser reelecto, jugó todo a ganador con su candidatura a legislador. Un triunfo le permitía no sólo ser el titular de la Cámara baja, sino que podía posicionarse como líder del peronismo y de la oposición en Santa Fe. Ninguna de sus proyecciones se concretó y fue el gran derrotado de la elección.