La tropa amarilla se siente perjudicada y quiere cambiar el cálculo de distribución. El radicalismo no acompaña. ¿Macrismo y PJ en la misma vereda?
Un nuevo cortocircuito en el interior del ex-Juntos por el Cambio tensa la unidad de hecho que el PRO y la UCR trataban de mantener en Buenos Aires, tras un proyecto que los amarillos presentaron en la Legislatura bonaerense para modificar el reparto de fondos a los municipios, lo que podría decantar en el fin de ese matrimonio por conveniencia.
Según pudo reconstruir Letra P, durante una reunión vía Zoom mantenida este miércoles, intendentes del PRO y sus espadas legislativas Agustín Forchieri (en Diputados) y Alejandro Rabinovich (en el Senado) acordaron el envío de una iniciativa al parlamento para cambiar el sistema de distribución de fondos destinados a las intendencias, argumentando que el metodología actual de reparto perjudica a los municipios amarillos.
El encuentro virtual tenía el objetivo de tratar los dos proyectos enviados por el gobernador Axel Kicillofa principios de año, en los que propone la creación de un laboratorio para fabricar medicamentos y una empresa bonaerense de emergencias. Casi la totalidad de la dirigencia del PRO rechaza esas iniciativas, lo que le complica el escenario de acuerdos al oficialismo, por lo que el debate podría postergarse para junio. Esa relación con el oficialismo podría cambiar si prospera la iniciativa amarilla que cae mal en el radicalismo.
El PRO quiere cambiar un artículo de la Ley 15.480 para que el cálculo utilizado para establecer el monto que recibe cada municipio salga en un 50% por el Coeficiente Único de Distribución (CUD) 2024 y el otro 50%, de acuerdo a los ingresos corrientes percibidos por cada distrito durante el ejercicio 2023. En la actualidad, el total del reparto se establece por el CUD, lo que, argumenta el PRO, perjudica a los municipios con mayor cantidad de habitantes, como Junín, Vicente López, Pergamino o Mar del Plata, todos gobernados por el PRO.
La norma actual rige desde diciembre pasado, ocasión en la que se modificó ese artículo en medio de las negociaciones que el oficialismo mantuvo con la oposición para la aprobación del endeudamiento y las emergencias solicitadas por Kicillof. En aquel momento, el Poder Ejecutivo resolvió crear un Fondo de Fortalecimiento Fiscal Municipal que las intendencias podrían usar como quisieran, lo que destrabó las negociaciones.
En la reunión de labor parlamentaria que se realizó este miércoles, previo a la sesión llevada a cabo horas más tarde, Forchieri solicitó tratar el proyecto sobre tablas, lo que fue denegado por las autoridades y pidieron que se envíe a la Comisión de Presupuesto. Allí, el PRO podría encontrar un socio inesperado: Unión por la Patria. Sucede que dicha comisión es presidida por el peronista Juan Pablo De Jesús, hombre del exjefe de Gabinete bonaerense y caído en desgracia Martín Insaurralde, quien, desde las sombras, mantiene su influencia sobre un grupo de intendentes del conurbano.
Los alcaldes peronistas no ven con malos ojos la modificación solicitada por sus pares amarillos, teniendo en cuenta que el Gran Buenos Aires se caracteriza por estar conformado por municipios muy populoso, gobernados mayoritariamente por el justicialismo, lo que en este caso los pondría en la misma vereda de los alcaldes del PRO.
Es distinto el caso de los distritos radicales que, a excepción de Tandil, en su mayoría no superan los 30 mil habitantes y se ven beneficiados con el actual sistema de reparto. Según le confirmó una autoridad legislativa boina blanca a Letra P, la UCR no va a acompañar la modificación propuesta por el macrismo.
De avanzar el proyecto, la relación entre los exsocios abriría aún más la herida entre ambos, vínculo que comenzó a romperse en aquellas negociaciones en las que los alcaldes radicales mostraron mayor predisposición a acordar con el gobernador. Tras el entendimiento para avanzar con el pedido de Kicillof, los bloques del PRO, la UCR y la Coalición Cívica acordaron trabajar juntos aunque cada uno desde su bloque legislativo. En las dos sesiones que Diputados lleva en 2024, las tropas que confluyen en el extinto JxC votaron en sintonía. El chispazo de este miércoles podría cambiar el rumbo de las cosas en la oposición atomizada..