Cargó contra el Presidente por amenazarlo con intervenir la provincia. "Cínico", "impune" y "autoritario", le dijo en el arranque mismo de su discurso.
Axel Kicillof, en la Legislatura, con Javier Milei en la mira.
Decidido a chocar de frente con Javier Milei, Axel Kicillof cargó durísimo contra el Presidente en el arranque mismo de su discurso de apertura de sesiones de la Legislatura. Lo llamó "impune, cínico e irresponsable" y se excusó de explicar el comprotamiento del mandatario porque no es "pisquiatra".
El gobernador de Buenos Aires se refirió, de esa manera, a la amenza presidencial de intervenir la provincia para dejar que el gobierno nacional se encargue del problema de la inseguridad. Recientemente, el jefe de Estado le redclamó a Kicillof que renunciara.
"Es un hecho sin antecedentes que no podemos pasar por alto", advirtió el gobernador y abundó: el episodio "parece irreal, una disopía tragocómica, pero es lo que ocurrió hace unos pocos días".
"Tal como ocurrió hace poco con una criptomoneda, el Presidente dice ahora que no quiso decir lo que dijo; peor, que lo dijo pero no estaba interiorizado en el tema. No sé qué es peor, si haber realizado la amenaza o hacerla y recular", dijo y apunto: "No se puede, Presidente, ser impune, cínico e irresponsable".
Kicillof acusó a Milei de "tomarle el pelo" a "toda la dirigencia política y a todo el pueblo con un tema tan delicado" y avanzó sobre un tema sensible. "No sé qué motiva al Presidente para comportarse así; no soy psiquiatra", señaló. La traducción es inquívoca.
El bonaerense consideró, además, que Milei cometió "una estafa política" y que usó "el poder que otorga el pueblo para atacar a la democracia", al tiempo que le recordó que "el gobernador al que livianamente le pidió la renuncia fue reelecto con puntos puntos de diferencia sobre el segundo".
"Con la democracia y el federalismo no se juega. Usted gobierna la Nación, pero no las provincias. Los gobernadores no somos sus empleados", le advrtió y fustigó sus "erupciones de autoritarismo".