Mariano Recalde puso primera y se zambulló en la carrera electoral del peronismo y el kirchnerismo porteño para dirimir el candidato a la Jefatura de Gobierno. El jefe del bloque K de la Legislatura porteña apuesta a competir y no escapa a una interna contra Victoria Donda o Matías Lammens, pero sostuvo abiertamente que “para ganar la Ciudad” es necesario un frente común “con todos”. Bajo esa idea, abrió la puerta a un gran acuerdo dentro del kirchnerismo porteño que, como contó Letra P, podría derivar en una candidatura de consenso, donde los outsiders no tan identificados con el peronismo cobran relevancia.
Con Donda ya lanzada y Lammens abierto a participar de una gran PASO opositora, Recalde decidió hacer pública su intención de competir mediante un discurso en el que intercaló dardos a las gestiones de Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta. “Fueron 12 años de fracaso. Se perdió una oportunidad enorme”, cuestionó.
“Tenemos que gobernar la Ciudad. Otra ciudad es posible, una ciudad moderna, más justa y con desarrollo económico. Es con todos”, resaltó. “Se puede ganar la Ciudad de Buenos Aires, metámoslo en nuestras cabezas”, agregó.
A pesar de que fue la cara del kirchnerismo en las últimas dos elecciones, Recalde no había dicho ni una palabra sobre su candidatura durante 2019, aunque se desempeñó como armador durante los últimos meses. Eligió catapultarse a la riña por la Jefatura de Gobierno en el marco del lanzamiento de un libro que recopila distintos diálogos con referentes porteños y artículos sobre problemáticas del distrito.
El nombre de la obra literaria, sugestivo y para despejar cualquier duda, es “Gobernar la Ciudad”. En la previa al acto, entre medialunas y mini tortas de limón y brownies, el ex diputado Héctor Recalde, padre de Mariano, recibía felicitaciones por la candidatura.
Junto al legislador porteño estuvo el flamante precandidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof. “Macri y Larreta hicieron un verdadero desastre”, asestó el ex ministro de Economía de Cristina Fernández de Kirchner, aplaudido a rabiar por la tribuna kirchnerista presente en el Teatro San Martín.
El precandidato repite el esquema que empezó a aplicar en terreno bonaerense: identificar a los candidatos del PRO con Macri y, por ende, a su gestión, con énfasis en la crisis económica. “Larreta es Macri” es el capítulo porteño del “Vidal es Macri” de la Provincia. Un juego de caracterizaciones que desnuda lo inocultable: tanto para el macrismo como para el kirchnerismo, la polarización será la viga maestra sobre la que se sostendrá la campaña.
“Axel en Provincia, Recalde en la Ciudad”, coreó un grupo de militantes cuando el diputado porteño tomó el micrófono. Un lema que satisface a un sector del kirchnerismo, pero que genera urticaria en el espacio que intenta ampliar el esquema K porteño. “Si Axel es el candidato a gobernador, no podemos imponer a Mariano como candidato único”, reflexionan en el PJ.
Entre otros, estuvieron en el acto el ex canciller Jorge Taiana, el parlamentario del Mercosur Eduardo Valdés, el ex ministro de Trabajo Carlos Tomada, los diputados porteños Javier Andrade, Paula Penacca, María Rosa Muiños y Victoria Montenegro; los diputados nacionales Daniel Filmus, Eduardo “Wado” De Pedro y Horacio Pietragalla. También, hubo lugar para actores, ex deportistas, hombres y mujeres del espectáculo y los medios de comunicación como Miguel “Titi” Fernández, Claudio Villaruel, Victoria Onetto (que ejerce como secretaria de Cultura de Avellaneda) y el ex secretario de Deportes Claudio Morresi.
