El revuelo por la inminente ola de privatizaciones de empresas del Estado que proclamó el presidente electo Javier Milei inicialmente generó un silencio sepulcral en el sur del país. Nadie del mundo petrolero se había manifestado sobre el anuncio del libertario de “ordenar”, para luego privatizar, a YPF. En las últimas horas, fueron los popes del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa los que dieron salutaciones al futuro presidente de la empresa de bandera, Horacio Marín, encargado de Producción y Exploración de Tecpetrol, la petrolera del Grupo Techint, el holding de Paolo Rocca. Subidos al nuevo esquema, hacen vanguardia en la relación.
“El Sindicato de Petroleros Privados recibió de manera positiva la designación de Horacio Marín como ceo y Presidente de YPF. Es reconocido por su amplia experiencia, destacándose como uno de los principales impulsores del desarrollo de Vaca Muerta, especialmente a través del proyecto Fortín de Piedra”, deslizó Marcelo Rucci, secretario de la poderosa organización sindical. Sus declaraciones se pliegan a las de su mentor en el gremio, Guillermo Pereyra, que planteó la necesidad de “acompañar” al presidente que asume el 10 de diciembre.
Las afirmaciones de Rucci elevaron el “profundo conocimiento de la industria, pragmatismo y buen diálogo con las organizaciones sindicales de la cuenca neuquina” de Marín, citando así el trabajo de la empresa en Añelo, donde se concentra la inversión más importante de shale gas del país.
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Guillermo Pereyra, histórico dirigente petrolero en Río Negro, Neuquén y La Pampa.
El único interrogante del gremio es el futuro de los obreros. “Como ya he comunicado a nuestros compañeros, el límite es el respeto por los derechos de los trabajadores”, se plantó Rucci, que se encuentra atento a las definiciones del presidente y su gabinete y de las implicancias que las medidas de la futura administración tengan sobre las fuentes de trabajo.
Como informó Letra P, Marín comandará YPF bajo la órbita de la Secretaría de Energía, que estará a cargo de Eduardo Rodríguez Chirillo, el abogado experto en privatizaciones que designó Milei para esa área. Entra a preparar el terreno para que la empresa deje de ser manejada por el Estado e inversores se queden con sus operaciones.
Durante la última década, YPF fue la principal promotora de fracturas en la cuenca neuquina. Salvo en el período 2015-2019, cuando Tecpetrol hizo diferencia por la famosa resolución 46, la firma de bandera desembolsó u$s 21.405 millones entre 2013 y 2022.
El guiño al innegable cambio de época fue impuesto por Pereyra. En declaraciones a la histórica radio AM de la capital neuquina, LU5, sorprendió a todos: “No hay que abrir juicios antes de que asuma y empiece a transitar la gestión porque empezamos a poner trabas de un principio y no es lo que está esperando la mayoría de los argentinos”.
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Durante sus últimos años de mandato frente al gremio, previo al arribo de Rucci, el histórico dirigente tuvo una buena relación con el macrismo hasta que los cortocircuitos y denuncias lo alejaron. Su ligazón con Hugo Moyano influyó en el cortocircuito con el gobierno de Cambiemos, hoy mezclado con el proyecto libertario.
“Acompañamos a Sergio Massa y perdimos. Ahora, hay que sumarse a lo que está armando el nuevo presidente y estar muy atentos a que no avasalle los derechos de los trabajadores”, cerró Pereyra.
