"Nos hacía falta encontrarnos para recordar cuántos somos", dijo la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, en la cumbre de la alianza Cambiemos que se desarrolló este viernes en el complejo porteño de Parque Norte, y amplió a los socios radicales y de la Coalición Civica la arenga que Horacio Rodríguez Larreta y Marcos Peña habían descargado sobre la dirigencia del PRO en el almuerzo previo al encuentro: "Tenemos que poner el cuerpo" ante la profundización de la crisis que golpea al Gobierno, dijo ante el pleno de la tropa oficialista.
Después de recordar sus primeros timbreos como candidata a la gobernación, la mandataria señaló que ninguno de los presentes "tiene zapatos más difíciles que los del Presidente" y pidió: "Tenemos que pensar lo que atravesamos para llegar hasta acá".
"Yo reconozco un único camino, que es el camino de lo que ya hicimos." (María Eugenia Vidal)
"Cada uno sigue tocando el timbre, eso es lo más importante. Seguimos dando la cara, porque eso es lo que somos", amplió.
Apelando a la épica de un gobierno que suele jactarase de enfrentar las mayores dificultades y arrogarse una ruptura en la tradición política argentina, llamó a "recordar siempre qué representa" la alianza gobernante, que "empezó en la gente antes que empezara Cambiemos"
"Era más profundo que una elección, era un cambio cultural, y hoy tenemos que ser más Cambiemos que nunca", agregó y remató: "Yo reconozco un único camino, que es el camino de lo que ya hicimos".
"Lo que vale la pena cuesta y lleva años", indicó la gobernadora para justificar la crisis de hoy en la línea conceptual de las tormentas y las turbulencias de las que suele hablar el Presidente, al tiempo que convocó a "seguir dando las peleas que nadie quiso dar" porque, consideró, Cambiemos está "dejando huella".
"Tenemos que estar todavía más cerca", arebgó, en sintonía con el llamamiento de Rodrígez Larreta y Peña a "salir más a la calle" porque, en la crisis, "un timbreo por mes no alcanza".
