Elecciones 2017

Cristina confirmó que no quiere competir con Randazzo

“Si es necesario que sea candidata, lo soy”, anunció en una entrevista televisiva, pero descartó ir a internas con su ex ministro y no habría lista de unidad. Intendentes deberán buscar alternativa.

Una hora y media de entrevista y una definición clave para el futuro del peronismo en la provincia de Buenos Aires: no habrá internas entre Cristina Kirchner y Florencio Randazzo. La ex presidenta ratificó el planteo formulado a un grupo de intendentes en el Instituto Patria y descartó competir contra su ex ministro, que pregona ir a las PASO. Sólo será candidata si consigue alinear al justicialismo en una lista de unidad. Un horizonte lejano, a un mes del cierre de listas.

 

 

“No estoy detrás de un cargo. Fui presidenta, diputada y senadora. Si es necesario que sea candidata lo puedo ser, pero sólo para lograr la unidad que permita reagrupar al campo popular y enfrentar a un Gobierno que cometió una gran estafa electoral”, anunció Cristina en el reportaje que concedió al canal C5N, y agregó: “Siento la responsabilidad histórica de pedir que se construya una unidad para revertir esta situación que vivimos”.

 

Cristina había encomendado a sus intendentes más leales la misión de acercar posiciones en todos los sectores, incluidos los que trabajan ahora para la candidatura de Randazzo, para lograr la unidad del peronismo. Pero la decisión de la ex presidenta de no presentarse en las PASO obliga al kirchnerismo a buscar una alternativa y acelerar las definiciones con un dato no menor: no hay ningún dirigente en ese espacio que hoy reúna los niveles de adhesión que todavía conserva la ex mandataria.

 

“No se enrosquen en discusiones estériles que dividan porque necesitamos unir a la mayor cantidad de argentinos”, le dijo la ex mandataria a sus seguidores al retirarse del Instituto Patria, en Rodríguez Peña 80, donde tuvo lugar la entrevista. “Les pido a los dirigentes del campo nacional y popular que dejen de lado los egos personales y centren sus objetivos y fuerzas en la defensa del pueblo argentino que está sufriendo”, insistió.

 

Cristina sostuvo que la oposición “debe rearmarse para evitar que la situación económica se deteriore aún más” y calificó al gobierno de Mauricio Macri como “una estafa” que “la gente  creyó gracias al trabajo que llevaron a cabo los medios concentrados”. Explicó que “ese engaño lo vimos en el debate presidencial, donde se dijo incluso que si de devaluaba no se trasladaría a los precios y que no se iban a pagar impuestos a las Ganancias”.

 

La ex jefa de Estado entre 2008 y 2015 aseguró que el Estado debe intervenir para que bajen los precios de los alimentos y las tarifas, y alertó sobre “el incremento de la violencia que se verifica en las calles".

 

“Coincido con lo que dijo el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, cuando dijo que 'la inequidad genera violencia'. Es algo que se verifica en las calles con el aumento de la inseguridad y los secuestros express. Creo que la Iglesia tardó bastante en decirlo”, observó.

 

LOS “TRAIDORES”, EL PODER JUDICIAL Y MILAGRO SALA. Cristina aprovechó la entrevista para criticar a los legisladores del Frente para la Victoria que acompañaron en el Congreso algunas de las iniciativas del oficialismo. Sin nombrarlo, se refirió, sobre todo, al sector del peronismo liderado por Miguel Pichetto en el Senado, que votó a favor de leyes clave, como el pago a los fondos buitre.  

 

“No quiero hacer nombres, pero hubo dirigentes parlamentarios de nuestro espacio que no estuvieron a la altura de lo que se necesitaba en esta etapa del país. Hay legisladores que no se arrepintieron de votar algunas cosas, ¿para qué lo hicieron?”, se preguntó.

 

Por otra parte, Cristina aseguró además que el Gobierno controla al Poder Judicial, y que el oficialismo “hay una guerra de bandas para ver quién pone o saca” a determinados magistrados. “Hay sectores que se enfrentan todos los días sobre cómo se controlan a los jueces. Son disputas en las que intervienen los medios y los servicios de Inteligencia”, denunció, e inquirió: “¿Dónde están los defensores de la república?”.

 

También se refirió a la detención de la líder de la organización social Tupac Amaru, Milagro Sala, detenida por varias causas en Jujuy desde enero de 2016, y calificó a la dirigente como “la primera presa política de Argentina”, al tiempo que vinculó esta situación con “el fallo de la Corte sobre el 2x1 que fue repudiado por una gran movilización popular”.

 

Respecto de los casos de corrupción que complican a la empresa brasilera Odebrecht y su intervención en nuestro país en el marco del Lava Jato, Cristina señaló que “los socios” de esa firma están ligados al gobierno de Macri.

 

“Me gustaría saber a quiénes le pagó Oderbrecht. Lo hizo a empresas como IECSA, del primo del presidente (Ángelo Calcaterra), que es la que gracias a un fondo de 35 millones de pesos se encargará del soterramiento del Sarmiento. Y a mí me investigan por unos alquileres y dicen que mi familia y mi gobierno es una asociación ilícita”, ironizó.

 

Lisandro Catalán y Osvaldo Jaldo, referentes de La Libertad Avanza y el peronismo en Tucumán. 
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