El Coliseo Podestá de la ciudad de las diagonales fue el escenario elegido por Diego Bossio en su carrera por la Gobernación que de a poco se intensifica. Junto con dirigentes locales, provinciales y nacionales presentó los lineamientos de una eventual plataforma de gobierno, que por ahora tiene formato de libro.
“Son 20 capítulos, 5 grandes ejes, más de 70 propuestas”, lo definió el tandilense, que poco a poco deja en claro sus intenciones para este año: “tengo vocación y sería para mí un gran honor gobernar la provincia de Buenos Aires, pero es una gran responsabilidad: no hay lugar para la improvisación, hay que estudiar con profundidad los temas, hay que estar al tanto de la magnitud de los problemas. Uno forma parte del espacio político que lidera la presidenta, y en ese marco uno va a tratar de aportar y ser una opción más”.
En esa tónica, el funcionario repitió una y otra vez que es Cristina la que debe bendecir a los candidatos y que por eso las peleas mediáticas no tienen mucho sentido. Con respecto a los últimos cruces entre sciolistas y randazzistas, dijo que “está bien que se debata y se discuta, pero con responsabilidad y madurez. Cuando hay falta de respeto y no hay responsabilidad en las apreciaciones me parece que no es bueno para el conjunto de los argentinos y la dirigencia”.
“El gobernador ha acompañado a Néstor Kirchner como vicepresidente, fue dos veces gobernador de la Provincia, ha hecho un esfuerzo grande para encaminar cuestiones muy complejas en la Provincia. Y el Flaco Randazzo… los aprecio a ambos, también a Urribarri, que tiene vocación y ganas”, elogió a todos.
“Yo soy un hombre de la presidenta de la Nación; soy respestuoso y desde muy chico trabajo con ella, en lugares decisivos y estratégicos para el Estado. Nosotros somos responsables y criteriosos a sus decisiones, y el tablero político lo va a ordenar la presidenta de la Nación, no tengan dudas. Nosotros, orgullosamente peronistas e inevitablemente kirchneristas somos respetuosos del liderazgo de Cristina”, expresó, esperando el guiño oficial para terminar de lanzarse.
“Es una provincia muy grande, no hay lugar para la improvisación y tenemos que tener en claro los objetivos”, dijo en tono de candidato. En este sentido fue también muy cauto para referirse al trabajo de Scioli en estos 8 años al frente de la Provincia. “La provincia de Buenos Aires ha avanzado mucho en estos últimos años. Si no avanza la Provincia no avanza el país. Pero también faltan muchas cosas”, analizó, opinando que “yo me resisto a pensar que la provincia de Buenos Aires es inviable y que sólo depende de barajar de nuevo y de los fondos de la Nación; tiene una potencialidad enorme”.
También se hizo lugar para hablar del líder del Frente Renovador, Sergio Massa, que al igual que él fue titular de la Ansés: “si empiezo a contar las cosas que Massa dejó pendientes, tenemos para otra charla y otro libro. Pero no importa… Sergio sabe muy bien cómo hemos trabajado nosotros, tengo un aprecio personal por él porque cuando inicié la gestión las cosas que eran buenas las continué y las que había que cambiar las cambiamos. No tiene nada que ver esta Ansés con la que él administraba”.
Lo acompañaron dirigentes peronistas como el ministro de Justicia Julio Alak, los legisladores Gustavo Oliva, Luciano Martini y Cristina Fioramonti, el concejal local Gabriel Bruera junto al bloque oficialista y los intendentes Pablo Bruera (La Plata), Mario Secco (Ensenada), José Inza (Azul) y Jorge Ferraresi (Avellaneda), entre otros.