El economista Ricardo Delgado reconoce a la Convertibilidad como "un gran instrumento para bajar la inflación", pero señala como un grave error el hecho de haberla confundido con "un plan económico en sí mismo". "Creímos que era eterna", lamenta y destaca a "la estabilidad" como el mayor desafío de la conducción política y económica del país.
El presidente de la consultora Analytica habla en medio del intenso debate que genera la propuesta del presidente electo, Javier Milei, de dolarizar la economía para controlar los precios, un plan que, si bien fue confirmado por el libertario después de ganar el ballotage, se diluye por las dificultades y las drástcas consecuencias que implicaría su implementación y la falta de respaldo que exhibe en los sectores de Juntos por el Cambio y el peronismo que están construyendo la base de gobernabilidad de la nueva administración.
La Convertibilidad, que ha sido reconocida como ejemplo de buenas práticas económicas por Milei, "fue un gran instrumento para bajar la inflación, pero nos creímos qe era eterna y un modelo económico en sí misma y ese fue un grave error". Finalmente, el programa "tuvo enormes problemas", recuerda.
Delgado dejó esas y muchas otras definiciones en una extensa charla que mantuvo con Marcelo Falak, antes de la definición del proceso electoral, en Democracia, 40 años: deudas y desafíos, el ciclo audiovisual de conversaciones producido por Letra P y la Universdad Abierta Interamericana (UAI) para reflexionar sobre cuatro décadas de vigencia del Estado de Derecho, sobre sus luces y sus sombras; sobre los aciertos y lo que falló.
El exconsultor del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) considera que siempre es "la politica" la responsable última de los buenos y los malos ciclos de la economía y rescata "pocos años felices en términos económicos en estas cuatro décadas". "De ocho a diez", precisa y enumera: "Una pequeña primavera en el gobierno de (Raúl) Alfonsín, allá por el Plan Austral (aplicado en 1985); entre el 92 y el 94, (con) la drástica caída de la inflación; los primeros años de Néstor Kirchner y el 2010 de Cristina (Fernández de Kirchner)".
"La gente termina enamorándose de lo que le da estabilidad", apunta y enfatiza en la necesidad "de encontrar los mecanismos y las vias para ordenar la cuestión fiscal y darle estabilidad a la proxima década".
Esta es la undécima charla que lanza Letra P. En la primera, el dirigente peronista Felipe Solá rescató la figura y el liderazgo de Raúl Alfonsín, aunque cuestionó su promesa fundacional. "'Con la democracia se come, se cura y se educa' fue una frase voluntarista, bien intencionada, pero un error. Con el diario del lunes, yo hubiera dicho 'con la democracia se convive'", señaló.
En la segunda entrega, María Eugenia Vidal (PRO) criticó "el mensaje" sobre el que Milei construyó el batacazo libertario, pero aclaró: "Hay una enorme responsabilidad nuestra" en la emergencia de esa consigna que llama a destruir. "Dejamos de representar", abundó.
En el tercer episodio, el radical Federico Storani alentó una confluencia del peronismo y el radicalismo como plataforma para superar la crisis actual y, para fundamentar su posición, rescató la experiencia bipartidista que permitió salir del caos de 2001 e inaugurar “un ciclo virtuoso” en el que la fuerza fundada por Leandro Alem “cogobernó” con el justicialismo. “En momentos de crisis muy profundas, esas experiencias son válidas”, sostuvo.
"No está resuelto el problema democrático" en la Argentina, consideró el líder del Partido Obrero, Eduardo Belliboni, en el cuarto capítulo, y adviertió que, ante la emergencia de una opción de ultraderecha competitiva, "hay caldo de cultivo" para "un grito represivo" en el país.
En la quinta entrega, la peronista Vilma Ibarra adelantó un par de conslusiones sobre el gobierno del que forma parte como secretaria de Legal y Técnica. Como coalición, el Frente de Todos "tuvo más problemas internos de los que debería haber tenido y (los tuvo) muy al aire libre", lo que "generó una situación muy compleja que le quitó fortaleza" a la administración encabezada por Alberto Fernández.
En el sexto episodio, Carlos Corach desacreditó por inviable el proyecto de dolarización que Milei ratificó en el debate presidencial del último domingo. "¿Qué va a hacer? ¿Va a imprimir dólares? Yo no soy economista, pero tampoco soy un tarado", dijo el peronista que fue figura central de la década menemista.
"Con democracia no basta, necesitamos estabilidad y desarrollo", advitió el empresario textil Teddy Karagozian en la séptima entrega. "La gente está peor", dijo el industrial y criticó "el Estado elefantiásico" y el sistema tributario argentino.
En el octavo capítulo, la periodista Miriam Lewin dijo que "negar el consenso internacional sobre que aquí no hubo una guerra sucia, sino un Estado terrorista atacando a la población civil, es anacrónico". Lo hizo frente a la reedición, a instancias del discurso que agita el movimiento de ultraderecha que lideran Milei y Victoria Villarruel, de "discusiones que dimos en los primeros años de la democracia y ya se cristalizaron a nuestro favor", señala la titular de la Defensoría del Público. En ese sentido, aclara: lo que hace La Libertad Avanza no es negacionismo, sino "apología de la represión ilegal".
En el noveno episodio, el cosecretario general de la CGT Héctor Daer negó que la falta de alternancia en la conducción de los gremios sea un déficit de esas organziaciones. "Existe democracia interna", aseguró. Además, pidió "más protagonismo" del movimiento obrero en la toma de decisiones políticas t cuestionó la interna entre Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner en la cúpula del Frente de Todos, aunque relativizó su impacto en el resultado del gobierno que termina.
"No hay una crisis de la democracia" como sistema, sino una serie de demandas básicas de la sociedad que "los gobiernos de la democracia" no han sabido satisfacer, distingue la socióloga Analía del Franco en la décima entrega del ciclo, consultada sobre el significado y el alcance de surgimiento de una fuerza de ultraderecha que en dos años viajó como un rayo de la nada misma a la Casa Rosada, donde se instalará Javier Milei el 10 de diciembre. Además, tranquiliza: el sistema "genera anticuerpos" contra expresiones que lo acechan.
En este interregno entre el aniversario del triunfo radical del 30 de octubre de 1983 y el de la asunción de Alfonsín, el 10 de diciembre de ese año, Letra P seguirá publicando las entrevistas realizadas con figuras relevantes de los más diversos origenes ideológicos y partidarios. Pasarán por esta tribuna, que reivindica el valiosísimo capital institucional, político y cultural construido en estas cuatro décadas, Federico Pinedo y Cristina Caamaño.