El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, reconoció diferencias entre los socios que integran Cambiemos, aunque minimizó el impacto real de estas internas, y aseguró que estos temas se “charlan puertas adentro”. Cuestionó además el “populismo” del gobierno anterior, y marcó diferencias al respecto.
Entrevistado por el programa Odisea Argentina, que se emite por el canal LN+, Posse indicó que “el radicalismo es la columna vertebral de Cambiemos y quien representa la vida más nueva, el partido más urbano, es el PRO. Nos unimos el PRO, el radicalismo, la Coalición Cívica, el partido de Patricia Bullrich, para enfrentar al populismo” explicó.
En los últimos días se dio una fuerte disputa pública entre la representante de la Coalición Cívica ARI, la diputada nacional, Elisa Carrió, y las autoridades de la UCR nacional.
“Lilita” había declarado en tono irónico que podía “manejar” al radicalismo “desde afuera”, una frase que provocó la reacción inmediata del histórico Partido. Las autoridades partidarias acusaron a Carrió de tener una actitud funcional a la oposición.
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“Hay problemas serios, reales en el país, y mostrar este problema es más para la varieté que para la vida pública, y más en este momento difícil de la vida pública” indicó el intendente de San Isidro.
Según expresó, las diferencias entre los aliados de Cambiemos “se charlan puertas adentro”, y le bajó el tono a la disputa entre Carrió y las autoridades de la UCR.
Posse marcó además diferencias con el anterior gobierno peronista K, y aseguró que “el radicalismo sostiene convicciones que tienen que ver con políticas a largo plazo y ese es el fundamento de Cambiemos. El populismo, a diferencia de lo que se piensa en Cambiemos, es solo pensar en el hoy”.
Y consultado sobre los distintos referentes del peronismo y un posible gobierno de este partido, fue contundente: "En la instancia que se vive en este momento, el mejor de los populistas, sería suicida para el país".