La renegociación del swap de monedas que logró Toto Caputo, en el centro de la agenda. Otras razones para cuidar la relación bilateral.
Toto Caputo con Wang Wei, embajador de China
"China es un socio comercial muy interesante. No exigen nada, lo único que piden es que no los molesten”, expresó el presidente Javier Milei este domingo. Una declaración impensada hace casi un año, cuando siendo candidato se negaba a hacer cualquier negocio con "comunistas". En gestión, la necesidad de financiamiento, entre las razones económicas para cuidar la relación bilateral.
En su entrevista con Susana Giménez, el primer mandatario confirmó un viaje al país asiático para participar en enero próximo de una cumbre conjunta entre China y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), la organización de 32 naciones fundada en 2011 por el entonces presidente de Venezuela Hugo Chávez.
Este lunes la Secretaría de Comercio rechazó un pedido de medidas antidumping para el ingreso de hornos eléctricos desde la nación gobernada por Xi Jinping realizado por tres empresas que comercializan ese producto.
En junio, el ministro Toto Caputo y su equipo económico lograron "renovar" el intercambio de divisas con el Banco Popular de China por u$s5.000 millones y patear los vencimientos de los intereses por el primer tramo ya utilizado para julio 2025, con la posibilidad de cancelar la deuda mes a mes y finalizar con los pagos en 2026.
Fue un alivio para las arcas del Banco Central, que estaban (y aún están) para ese entonces en terreno negativo, pero fue una negociación embarrada por el exabrupto de Mondino, quien cuando se le consultó sobre si habían detectado actividad militar en la base que ese país tiene en Neuquén contestó: "Son chinos, son todos iguales".
Pese al malestar que causó, Pekín hizo un gesto. Aunque quienes tienen vínculos en el país asiático afirman que no fue un respaldo "completo". Por ejemplo, faltó un comunicado simultáneo de la autoridad monetaria china.
"Ese año de gracia que le da al Gobierno para que junte el dinero para pagar el swap es un plazo para poner a prueba la relación con Xi", planteó una fuente.
Las señales de intento de reparación de un vínculo que inició tenso por los dichos del Presidente y de la canciller Diana Mondino y que impactaron en las negociaciones por el swap de monedas e inversiones de infraestructura.
Ahora, el Gobierno parece haber dado un giro pragmático en medio de la necesidad de financiamiento externo aunque en el equipo económico advierten que la relación "no cambió".
"Siendo presidente no me parece que hizo ningún cambio. El vínculo siempre fue constructivo", señaló una fuente cercana al entorno de Caputo.
“Se puede tener relación con ambos, con China y Estados Unidos, no es una contradicción", advirtieron desde otro despacho oficial del quinto piso del Palacio de Hacienda.
Para el analista internacional Marcelo Elizondo, "Argentina necesita mejorar tanto el acceso a financiamiento en dólares como el comercio internacional" y su alianza con Occidente, "no le ha generado resultados prácticos hasta ahora".
"China es la segunda economía internacional, puede ser generador de inversiones o incluso de dólares financieros para la Argentina. Ha ofrecido distintas posibilidades de inversión a la Argentina durante muchos años que no se han concretado, China no es un gran inversor en la Argentina, y la Argentina está buscando inversiones, por lo tanto probablemente esté pretendiendo Milei que China ofrezca también proyectos de inversión en la economía real en el país", explicó.
Existe un listado de proyectos con financiamiento chino que están frenados por falta de fondos, deterioro de las relaciones o mala combinación de tiempos. Entre varios, a la gestión libertaria le interesa avanzar en dos: las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic en Santa Cruz.
Fueron licitadas bajo la administración de Cristina Fernández de Kirchner y en la era Mauricio Macri se avanzó con informes ambientales y el pedido de modificar las necesidades de la obra. Hasta ahora, sólo hay adendas que se anexan a los contratos y que Caputo debería firmar para liberar los desembolsos que completarían los u$s4.700 millones totales que representa la iniciativa.
También hay documentos para la inversión directa en 12 proyectos de minería con participación de capitales del país asiático (siete relacionados al litio, uno de los minerales con potencial exportador fuerte).
China es en la actualidad el segundo socio comercial. La balanza comercial está en positivo por u$s378 millones en el segundo trimestre 2024, de acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
A este dato oficial, Elizondo sumó que en el primer semestre del año las exportaciones crecieron un 24%, "siempre impulsadas por los grano".
Según datos de la consultora Abeceb, en 2023, el 4,4% de la Inversión Extranjera Directa (IED) fue producto de u$s1.000 millones instalados en suelo argentino. En gran parte, el interés en el país crece por iniciativas en minería.