Sería un 0,41% del PBI, estimado en $600.000 millones. Buscará restituir la cuarta categoría del impuesto con el porcentual que salió de la cámara baja.
Javier Milei y Toto Caputo frente a la inflación
El gobierno de Javier Milei se perdería de recaudar el 0,41 del PBI, estimado en $600.000 millones, si el título de la restitución del impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría no pasa el nuevo debate del paquete fiscal en la Cámara de Diputados.
La única chance que tiene el oficialismo para revertir ese revés en el Senado, es lograr que la cámara baja insista con la sanción original del proyecto, con igual mayoría que la que rechazó este título.
En la iniciativa primaria girada por el Poder Ejecutivo, la administración libertaria planeaba aumentar la recaudación en un 0,50% del PBI e incrementar la coparticipación a las provincias.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), el texto aprobado en la Cámara de Diputados lo redujo a 0,43% y luego de las modificaciones llegó al Senado al 0,41% del producto.
"Vamos a trabajar en Diputados y estoy seguro que saldrá Ganancias y otros cambios”, confirmó el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, en declaraciones radiales.
Pese a que el Senado aprobó en general la ley ómnibus XXS, rechazó en particular el título quinto del texto que preveía las modificaciones al impuesto a las Ganancias incluidas en el paquete fiscal.
El restablecimiento del impuesto a las Ganancias de la cuarta categoría para trabajadores en relación de dependencia, a niveles similares a los que dejó el ex ministro de Economía Sergio Massa, fue rechazado por 41 votos contra 31.
Este punto era clave para el Poder Ejecutivo, que buscaba recomponer los ingresos fiscales y dejar de depender de tributos de emergencia o distorsivos como el Impuesto PAIS, con el objetivo de alcanzar y mantener el equilibrio fiscal.
La ley vigente fue aprobada en septiembre de 2023 durante la campaña presidencial y eximió del impuesto a 800.000 personas asalariadas. También elevó el piso del mínimo no imponible para trabajadores y personas jubiladas que perciban 15 salarios mínimos vitales y móviles (SMVM)
Las personas contribuyentes tributan según la diferencia entre su haber y el mínimo establecido, con alícuotas que van del 27% al 35%, dependiendo del nivel de ingresos.
El proyecto rechazado en abril por la cámara baja establecía un nuevo esquema en el que la categoría más baja, con un salario bruto de hasta 1.800.000 pesos (equivalente a un salario neto de hasta $1.494.000), quedaba eximida del tributo.
Para la persona trabajadora soltera con dos hijos menores a cargo, el salario bruto más bajo alcanzado por el impuesto era de $2.100.000; y para una empleada casada con dos hijos menores a cargo, el mínimo imponible era de $2.400.000.
Las escalas de alícuotas eran más progresivas, moviéndose entre un 5% y un 35%, con la tasa máxima aplicándose a partir de un ingreso de $36.450.000.
Los tramos de las escalas aumentaban entre un 32,07% y un 150,73% respecto al proyecto presentado en enero. Las deducciones personales y los tramos de las escalas del impuesto se ajustarían anualmente según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Las deducciones personales aumentarían entre un 183,75% y un 186,65%, sin cambios respecto a la deducción especial para determinadas personas jubiladas y pensionadas, que se mantenía en ocho haberes mínimos garantizados. También se eliminaban deducciones por gastos de movilidad, viáticos y compensaciones, y se derogaba el incremento del 22% de las deducciones personales para residentes en la Patagonia.
Además, se eliminaban exenciones para el Sueldo Anual Complementario (aguinaldo), las horas extras y días feriados, suplementos para el personal militar, y guardias y horas extras para el personal de salud.