El Círculo Rojo tiene infinitos puntos en su interior que influyen, a su modo, en la escena político económica y buscan tener certezas de cara al futuro;. Y que, claro, se intensifican en un año de elecciones presidenciales. Uno de esos puntos, que guarda equidistancia del poder de turno, es la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE), una organización fundada en 1952 por un grupo de personas de fe lideradas por Enrique Shaw, quien a fuerza de virtudes propias y milagros por su intercesión podría convertirse en el primer empresario santo de la historia de la Iglesia.
Inspirada en los valores cristianos y sobre la base de la Doctrina Social de la Iglesia, la entidad empresarial cristiana tiene por primera vez en sus casi 71 años de historia a una mujer como presidenta (aunque ella prefiera la fórmula neutra). Se trata de Silvia Bulla, actual directora de Recursos Humanos para América Latina de International Flavors and Fragances y titular de Danisco y Solae Argentina, tras 32 años a cargo de la multinacional DuPont en Argentina.
En 2020 fue reconocida como la mujer destacada del ámbito empresarial por parte de Women Corporate Directors Foundation. Es miembro del directorio de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en Argentina (AmCham) y del Instituto para el Desarrollo Empresarial de Argentina (IDEA). Elegida por unanimidad en la última asamblea de ACDE celebrada en abril, tiene mandato hasta 2026 y sucedió en la presidencia a Gonzalo Tanoira, de la Citrícola San Miguel.
Dos de los primeros pasos de Bulla al frente de ACDE marcan la impronta que tendrá su gestión. La primera fue el encuentro con el papa Francisco horas antes de que el pontífice sea ingresado en el Policlínico Gemelli de Roma para una operación por una hernia abdominal. La segunda: una declaración a favor del diálogo y la paz social en Jujuy en medio de la crisis desatada por el proceso de reforma parcial de la Constitución encarado por el gobernador Gerardo Morales, en línea con el pedido de la Iglesia y del empresariado local. Bulla también prepara el encuentro anual de la entidad enfocado en “testimonios que muevan a la acción de hombres y mujeres de empresa orientados por los valores cristianos”.
En sus primeras declaraciones públicas, empapadas con la prédica de Jorge Bergoglio, Bulla expresó su preocupación por la pobreza y la inflación, sostuvo que la persona debe ser el centro de toda actividad económica, advirtió sobre la volatilidad cambiaria, abogó por el diálogo multisectorial y la búsqueda de consensos, y reclamó a quienes se postulan a la Presidencia que expongan cómo afrontarán la crisis socioeconómica y qué medidas adoptarán para dar certezas al sector empresarial.
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Bulla está secundada en las vicepresidencias primera y segunda de ACDE por Ignacio Gorupicz, socio de la consultora de alta dirección McKinsey & Company; e Ignacio Driollet, director de Estrategia en Gases Comprimidos S.A. La mesa directiva también está compuesta por Pablo Balancini, ceo y cofundador de Legal HUB (tesorero); y Alejandro Arauz Castex (protesorero), el abogado que acompaña al exsenador Esteban Bullrich en su idea de promover una carta de intención de doce puntos para un gran acuerdo nacional.
También la acompañan Daniel Martini (secretaría), dirigente de la Acción Católica Argentina, ex director ejecutivo del Departamento de Laicos (DEPLAI) del episcopado argentino, ex director de comunicación de Edesur y actual director ejecutivo de la Asociación de Distribuidores de Gas; Paula Valente (prosecretaria), asesora global de recursos humanos en Talent Advisor & Talent Acquisition Consultant; y Gonzalo Oliva Beltrán, abogado del estudio Barreiro, Oliva, De Luca, Jaca & Nicastro, y Guillermina Rocabado Castro, asesora y analista de Riesgos en Cohen Aliados Financieros, como vocales. El asesor doctrinal es el sacerdote Daniel Díaz y la directora ejecutiva, Ana Pico Aguirre.
Bergoglio, detrás de la santidad de Shaw
Quienes impulsan desde ACDE la canonización de Enrique Shaw reconocen que Bergoglio, siendo cardenal en Buenos Aires, era un poco escéptico en bendecir esa propuesta para elevar al Vaticano y hasta decía que era imposible que un dirigente de empresa fuera proclamado santo. Ya en Roma, el papa cambió de punto de vista y en 2015 dijo a la televisión mexicana que estaba llevando adelante la causa de beatificación (primer paso a la santidad) de “un rico empresario argentino, Enrique Shaw, que era rico, pero era santo”.
Desde entonces, Bergoglio acompaña los esfuerzos de ACDE para que avance el proceso canónico de su fundador (deben reconocerse dos milagros –ya hay uno en estudio- por su intercesión). Shaw fue gerente general de Cristalerías Rigolleau, donde impuso una visión humana y cristiana de la empresa; al punto que en 1959, a raíz de una caída fuerte en las ventas, presentó un plan de contingencia a fin de preservar las fuentes de trabajo de 1200 obreros que el directorio le había ordenado despedir. Tiempo después enfermó de cáncer, y buena parte del personal acudió a la clínica a donarle sangre; un gesto que Shaw llegó a agradecer antes de morir en 1962, con una frase que es recordada: “Puedo decirles que ahora casi toda la sangre que corre por mis venas es sangre obrera”.
Enrique Shaw: 100 años de un testimonio transformador | ACDE #CentenarioEnriqueShaw
Entre quienes apoyan la causa de beatificación de Shaw están el exdirigente sindical y extrabajador de Rigolleau Carlos Custer, el exfuncionario Gustavo Beliz y dirigentes de empresa asociados a ACDE como Juan Pablo Simón Padrós (Spencer Stuart), Luis Bameule (Family Office), Rodolfo Iribas (Enrique R Zeni y Cía), José María Simone (Impulsar Soluciones Agroempresariales), Juan Carlos Sagardoyburu (BitX), Eduardo Serantes (Cazenave y Asociados) y Silvia Torres Carbonell (IAE Business School).
Un banquero “amigo de la casa” y asesor de Bullrich
La incorporación reciente de Enrique Cristofani, expresidente del Banco Santander, al equipo económico de la presidenciable Patricia Bullrich (Juntos por el Cambio) hizo mucho ruido en ambientes empresariales, y hasta derivó en especulaciones sobre la supuesta cercanía del exbanquero con ACDE.
Fuentes de la asociación empresario cristiana consultadas por Letra P precisaron que “nunca fue socio, pero a partir de su gran amistad con algunos empresarios que fueron, en su momento, dirigentes de ACDE, tuvo una etapa en la que estuvo involucrado, sobre todo como espónsor”.
“Hubo una etapa en la que el Santander fue un aportante importante de la entidad y él participó en foros y encuentros anuales como orador”, puntualizó. “Así como llegó a participar activamente de la entidad, un día dejó de hacerlo”, sostuvo la misma fuente al reconocer que algunos internamente lo definieron como “un amigo de la casa; un amigo de la familia”.
Bullrich Cristofani
Patricia Bullrich y a su espalda Enrique Cristofani
