Cada uno de los movimientos que se registraron en la última sesión en el Concejo Deliberante de Florencio Varela, terminaron beneficiando al intendente Julio Pereyra. El martes debía tratarse la Rendición de Cuentas del año 2016. Sin embargo, los cruces entre los tres bloques que componen la oposición superaron el consenso alcanzado para rechazar el pliego y no lograron los votos necesarios para desaprobarlo. Ajustándose a la normativa, el pereyrismo logró una aprobación tácita de la ordenanza.
Veinticuatro son las bancas que componen el cuerpo de concejales varelense. Nueve son del oficialismo. El resto de la oposición: siete Cambiemos, seis Frente Renovador y dos Nuevo Encuentro. Hasta el martes, todo indicaba que el pereyrismo nuevamente asistiría a la desaprobación de la Rendición de Cuentas, teniendo en cuenta que había avanzado un dictamen de mayoría de la Comisión de Hacienda que rechazaba el balance.
OFICIALISMO Y OPOSICION. La minoría en el Concejo Deliberante no ha impedido a Julio Pereyra gestionar. Logró recuperar el control del cuerpo, tras la frustrada presidencia de Cambiemos y el Frente Renovador. Los cruces con Nuevo Encuentro, le valieron el reto de CFK durante un encuentro con intendentes.
Sin embargo, la oposición no alcanzó el quórum tras una serie de cruces y cuestionamientos entre las distintas bancadas.
“Nuevo Encuentro no bajó al recinto y con su ausencia no pudimos obtener el quórum para desaprobar la rendición”, señaló a Letra P el concejal de Cambiemos Dardo Ottonello, quien denunció que el sabbatellismo acordó con el pereyrismo la maniobra para alcanzar una aprobación tácita del pliego, teniendo en cuenta que el 31 de mayo vence el plazo para presentar el dictamen, según la ley Orgánica de las Municipalidades
En rigor, en el recinto había 21 de 24 concejales. El quórum para avanzar se lograba sumando 13 voluntades. Pero a la ausencia de los dos representantes de Nuevo Encuentro- Héctor Hugo Salatino y Mariano Camilletti- hay que sumarle un nuevo faltazo del edil del Frente Renovador Juan Olmedo. Su sola asistencia sumaba las manos necesarias para desaprobar la ordenanza.
“La mayoría de los concejales íbamos a votar la desaprobación. El dictamen de mayoría de la Comisión de Hacienda, firmado por Cambiemos, Frente Renovador y el propio Nuevo Encuentro, aconsejó la desaprobación pero insólitamente ayer (por el martes) los integrantes de NE no bajaron al recinto y luego los pereyristas, a mitad de la sesión, anunciaron que se retiraban, incluida la Presidenta”, agregó Ottonello.
Consultado el concejal de Nuevo Encuentro, Camilletti, sobre las razones de su ausencia, explicó: “Los únicos concejales que estuvimos yendo al Ejecutivo a analizar los papeles y expedientes fuimos nosotros. Desde hace varias semanas el massismo no viene participando de las sesiones y apareció ayer a hacer un usufructo político de esa sesión”, y agregó: “Nosotros no nos íbamos a prestar para nos utilizaran políticamente los concejales del Frente Renovador y Cambiemos”.
Cabe destacar que el Frente Renovador no estaba participando de las actividades del Concejo desde la escandalosa sesión de noviembre del 2016, presidida por el massista Daniel Zisuela, cuando se desató una furia entre ediles y público que terminó con golpes, insultos, sillazos, robos, saqueos y la renuncia de la conducción.
Desde Nuevo Encuentro, no solo cuestionan la aparición del massismo para esta sesión, sino el haber firmado el dictamen de mayoría sin haber leído los expedientes. “El presidente de la comisión, el massista Zisuela, vino solamente a esa reunión de comisión a firmar el dictamen, las anteriores siempre la encabezó el vicepresidente”, detalló y agregó que desde su bancada emitieron un comunicado con los puntos en desacuerdo de la Rendición de Cuentas que será elevado al Tribunal de Cuentas.
Sobre las expresiones del resto de la oposición que los responsabilizan de no haber logrado el quórum, indicó: “Cambiemos y el Frente Renovador suman trece concejales. La presencia total de esos bloques aseguran el quórum, pero nos quieren responsabilizar a nosotros de desaprobarla” y agregó que de prosperar la nota enviada por Cambiemos en la que solicita una nueva sesión especial para intentar tratar el pliego, sólo asistirán “si el resto de los bloques está completo”.
En tanto, desestimó un pacto con Pereyra para evitar el rechazo del pliego. “No tenemos ningún acuerdo y cuando se dilucide la estrategia electoral a nivel nacional y provincial, nosotros vamos a pedir una PASO para enfrentarnos al candidato del oficialismo”, señaló y precisó que el postulante de NE será Salatino.
Desde el bloque oficialista, el presidente de la bancada del FpV, Antonio Suárez, explicó a Letra P que se retiraron del recinto porque no querían “ser parte de una tribuna política en la que no se discutiera el expediente, sino la posición política de cada bloque sobre cómo el Ejecutivo había hecho la gestión. No nos íbamos a prestar a este juego y por eso nos retiramos”
Además, Suárez, cuestionó la “aparición repentina del massismo, cuando desde hace tres meses que faltan a las sesiones y ayer vinieron pura y exclusivamente a desaprobar un expediente que no leyeron”.
En tanto, sobre las posibilidades de que el proyecto nuevamente sea puesto en consideración en el recinto, ante el pedido cursado por un bloque de la oposición, señaló: “No tenemos forma de tratarlo, porque hay tiempo para presentarlo hasta el 31 de mayo que se vence hoy, lo que implica que fue aprobado de manera tácita”.
“Todo este revuelo terminó beneficiando al intendente”, señaló Letra P al concejal oficialista, quien desestimó la afirmación y lanzó: “No hay beneficiarios, solo perjudicados, que son los vecinos que votaron a concejales que no asisten a las sesiones”.