Tras el marcado posicionamiento que tuvo la gobernadora en contra de las carreras de galgos, una nueva polémica referida al proteccionismo animal vuelve a golpear las puertas de María Eugenia Vidal. Con la firma de su presidente, Dr. Osvaldo Rinaldi, el Colegio de Veterinarios bonaerense le envió días atrás una carta a la mandataria provincial haciendo eje “en dos problemáticas centrales: la gestión de los Centros Antirrábicos de la Provincia, y las violaciones constantes y sistemáticas a la normativa vigente en materia de salud pública durante la gestión de las 'campañas de castración masiva' llevadas adelante por distintas ONG’s”. En tanto, la entidad profesional anexó un proyecto para abordar estas cuestiones.
La respuesta de parte de estas organizaciones a la extensa misiva del Colegio no tardó en llegar, y ya juntan firmas en las redes para que Vidal otorgue una audiencia a la abogada proteccionista Graciela Fayt, hija del ex juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Carlos Fayt.
Sobre las castraciones masivas de perros y gatos, el Colegio de Veterinarios denunció en su carta a la gobernadora "la violación constante por parte de asociaciones proteccionistas" a normas referidas a la protección de la salud pública que establecen la práctica de la estirilización quirúrgica como único método para el control del crecimiento poblacional de perros y gatos, como así también que "todo tipo de cirugías de animales deben ser realizadas por profesionales veterinarios y su infracción es una clara violación al artículo 247 del Código Penal".
Aquí, se advirtió que los animales castrados por fuera del ámbito profesional por lo general no tienen un control pre quirúrgico ni seguimiento postquirúrgico, mientras que, se subraya, "ningún profesional se hace responsable ante posibles complicaciones".
Y alertan aludiendo a una suerte de mala praxis: "Los sitios destinados a este tipo de eventos en la mayoría de los casos no reúnen las condiciones mínimas para garantizar un adecuado acto quirúrgico ni el bienestar adecuado de los animales operados, encontrándose sitios por ejemplo, sin agua potable o a la intemperie, en los cuales los animales luego de ser operados son depositados en pisos de tierra, con temperatura no adecuada, generando esto un sinnúmero de complicaciones postquirúrgicas que pueden incluso conducir a la muerte del animal".
CONFLICTO SANITARIO. Por otro lado, con respecto a la gestión de los Centros Antirrábicos de la Provincia, se destacó: "Se han transformado de un conflicto sanitario a una cuestión social, donde entidades proteccionistas reclaman un rol de participación que excede las incumbencias que se les atribuyen y altera el rol fundamental que deben cumplir estos centros en materia de prevención de enfermedades zoonóticas".
Tras aludir a un “profundo trabajo en la prevención de las enfermedades basado en políticas públicas consensuadas y sustentables de las que participen los distintos niveles de gobierno”, el Colegio exigió “que la salud pública esté exclusivamente en manos de profesionales capacitados y responsables”.
Así, se indicó que la problemática vinculada al manejo de los Centros de Zoonosis en la provincia "hasta el momento no ha encontrado un encuadre técnico-profesional que siente criterios estables y permanentes y establezca claramente los límites de las asociaciones proteccionistas en este ámbito”.
Y se añadió sobre la estructura y gestión de los Centros de Zoonosis: “Es innegable que existe un deterioro de estos aspectos y que la mayoría de los municipios no cumplen con las condiciones básicas necesarias para su efectivo funcionamiento: falta de presupuesto, de personal técnico capacitado, de políticas integradoras referidas a la salud pública y animal”.
Bajo este escenario, y al anexarse un proyecto, la entidad presidida por Osvaldo Rinaldi, cerró su misiva a la gobernadora: “En la búsqueda de una solución que armonice la necesidad del control poblacional de perros y gatos, este Colegio desarrolló un proyecto de reglamentación para el accionar de las entidades proteccionistas. Se trata de un marco base para la celebración de convenios entre los Municipios y las asociaciones proteccionistas, en el cual se vela por un mínimo cumplimiento de la normativa vigente, preservando de esta manera la salud pública”.
RÉPLICA Y PEDIDO DE AUDIENCIA. Al dar cuenta de esta misiva publicada por el Colegio de Veterinarios, algunos proteccionistas salieron al cruce por las redes sociales, en tanto que algunos comenzaron a recolectar firmas en la web con el objetivo de que la gobernadora Vidal reciba a la Dra. Graciela Fayt, en representación del proteccionismo de Argentina, “así escucha la otra campana sobre lo que sucede en los centros antirrábicos y con las castraciones masivas llevadas adelante por las diferentes organizaciones que están dando servicio a los sectores más vulnerables de la población”. En tanto, pusieron en tela de juicio la intervención de la entidad profesional al hablar de "ocultas intenciones puramente económicas".
Así, se cuestionó el proyecto del Colegio: “Tiene la intención de terminar con las campañas de castración, basándose en mentiras contra el proteccionismo, tildándolo de peligroso para la salubridad de la población por las campañas de castración que realiza. Tampoco dice que las ONG y proteccionistas que el Colegio viene persiguiendo desde hace años prestan el servicio que los Centros de Zoonosis en manos del Colegio no da y la gente necesita con desesperación”.