Este martes se reunieron las comisiones de Presupuesto de ambas cámaras legislativas bonaerenses. El Ejecutivo mandó al titular de la Agencia de Recaudación Buenos Aires (ARBA), Gastón Fossati, y a funcionarios del Ministerio de Economía para convencer a los legisladores de que voten el proyecto girado por la gobernadora María Eugenia Vidal semanas atrás. La iniciativa adhiere al blanqueo impulsado por el Gobierno nacional, pero hasta el momento encontró más resistencia que apoyo y reveló las diferencias entre ambas carteras provinciales.
Los legisladores del Frente Renovador marcaron sus diferencias en cuanto al título II del proyecto; es el que establece un “régimen de regularización de deuda de agentes de recaudación”: es decir una moratoria.
“Queremos ver que empresas incluyen para la moratoria y esas cuestiones” porque “no sabemos el universo que es. Aparte entra la ley fiscal impositiva y votar una moratoria ahora parece innecesario, hay que analizarlo”, le dijo a Letra P el senador Gabriel Pampín del bloque del Frente Renovador.
La semana pasada el massismo había alertado sobre la posibilidad de votar solo la adhesión al blanqueo y Cambiemos había dado el aval, mientras se seguía discutiendo el título II de la ley.
Pero en el correr de la discusión el peronismo no acompañará el título I del blanqueo, es decir la adhesión. Hasta tanto no se garantice que los fondos que ingresen por bienes no declarados sean girados a los municipios, tal como ocurrió en la provincia de Salta.
La semana pasada cuando se votó la misma iniciativa en la provincia norteña, uno de los puntos destacados por varios legisladores fue la decisión de coparticipar a los municipios el 15% de lo que se recaude por este concepto. Y eso es lo que reclaman los legisladores peronistas con llegada a los intendentes para acompañar la iniciativa.
La reunión evidenció las diferencias entre el ministerio de Economía y Arba. Es que ARBA precisa de la moratoria, mientras que el ministerio, presionado por Nación, necesita darle a Vidal la garantía ante el gobierno de Mauricio Macri que los bonaerenses empezarán a declarar sus bienes, que tengan tanto en el país como en el extranjero. Por el momento, a nivel nacional, el blanqueo viene lento.
Hasta el miércoles, antes de la sesión en el Senado, habrá tiempo para firmar un dictamen. La intención del oficialismo es votar por lo menos el título I que establece los “beneficios” que implica sumarse al blanqueo. Necesita los dos tercios de ambas cámaras.
Entre otras cuestiones se libera del “pago de los Impuestos de Sellos y/o a la Transmisión Gratuita de Bienes que eventualmente pudieran corresponder con relación a los actos, contratos u operaciones que se formalicen o a las transmisiones gratuitas que se efectúen”.
El propio Fosatti explicó luego del encuentro que "se consensuó que en una primera instancia se dará tratamiento a la liberación del pago de impuestos provinciales para aquellos contribuyentes o responsables de tributos que declaren tenencias de bienes, tanto en el país como en el exterior"
Además informó que "la propuesta de un plan de pagos orientado a los agentes de recaudación de los impuestos sobre los Ingresos Brutos y Sellos, que complementa el proyecto de adhesión, se tratará en forma diferenciada para posibilitar un análisis pormenorizado de los legisladores".
"Este programa de regularización involucra a 3.135 empresas bonaerenses que enfrentan problemas para saldar sus deudas fiscales. Hay 230.000 trabajadores, en distintos distritos de la Provincia, que dependen de la actividad de estas firmas. El plan de pagos busca brindarles una solución, ya que les daría la oportunidad de hacer frente a sus obligaciones tributarias", agregó.