A partir de la designación de Jorge Allen como nuevo gerente General del Banco Provincia, la entidad gremial que nuclea a los trabajadores de la banca pública bonaerense le cuestionaron al titular de la entidad, Juan Curuchet, que Allen no prestó servicios allí hasta su actual nombramiento, algo que es tomado como un intento de “cortar la carrera bancaria” y “privatizar la Gerencia General”, ante lo cual advirtieron: “Ni lo piensen”. En tanto, el directorio del Bapro emitió un comunicado defendiendo la decisión, amparándose en la “vasta experiencia” del polémico designado.
En este sentido, la cúpula de la entidad bancaria señaló que “la fue tras el pedido de jubilación del ex gerente general, Marcelo García”, y que “el nombramiento de Allen fue decidido en forma unánime por los nueve miembros del directorio del Banco Provincia, designados con acuerdo de todas las fuerzas políticas en el Senado provincial (PRO, UCR, Frente Renovador y Frente para la Victoria).
Entre los argumentos del directorio para designar a Allen, destacaron “su vasta experiencia en el rubro bancario y financiero, así como su valioso aporte para la confección del Plan Estratégico de Gestión para el período 2016-2019”.
En paralelo, se remarcó la política de promover a cuatro gerentes del Banco Provincia como nuevos subgerentes generales, a la vez que se destacó “que continúan en sus cargos Marcelo Ávila (Procesos y Tecnología) y Gonzalo Diz (Finanzas), los dos ejecutivos más jóvenes de la entidad en acceder al rango de subgerente general”.
Falta de respeto. Más allá de este descargo, la comisión gremial interna de trabajadores del Bapro dio a trascender un comunicado firmado por su titular, Santiago Etchemendi, en el que se repudia el “mínimo intento de sólo dar cabida a tamaña decisión” de incorporar en puestos jerárquicos a “personas ajenas a la entidad y sin formación en la misma.
Y subrayaron: “Que a todos los cargos de Dirección del Banco se acceda por la carrera bancaria interna, es lo que da equilibrio ante un Directorio que elige democráticamente el poder político provincial. Tienen 10.550 trabajadores y trabajadoras para elegir como conducción ejecutiva para las decisiones que ustedes entiendan como la orientación que tendrá su gestión. Pretender que no hay ningún compañero apto para ocupar todos los puestos en discusión es directamente una falta de respeto a los años de aprendizaje que sólo se consigue remándola acá adentro, estudiando y pasando crisis como muchas de las vividas”.
En la misma línea, apuntaron los trabajadores: “Quizás alguno de ustedes aún no termina de comprender la responsabilidad política que han asumido al aceptar ser directivos de este Banco. Pero los trabajadores del mismo se lo vamos a recordar cada día”.
“Es nuestra responsabilidad preservar al Banco como institución pública, así que sepan claramente que somos miles los que hoy estamos en alerta, porque cortar la carrera bancaria, privatizar la Gerencia General además de faltar el respeto a nuestra idoneidad colectiva, única e irreemplazable, atenta contra la historia y el presente del Banco de la Provincia de Buenos Aires. Así que ni lo piensen”, puntualizó el comunicado firmado por el secretario General de la Comisión Gremial Interna Seccional Buenos Aires, Santiago Etchemendi.
Designación "arbitraria". Por otro lado, cabe señalar que en la sesión última del Senado provincial, el legislador del bloque justicialista Patricio García indicó que la designación fue “manifiestamente arbitraria” por “vulnerar los derechos de los trabajadores” y, además, “soslayar la carrera del trabajador bancario”.
El Senador informó de esta situación a través de un proyecto de declaración en el que manifestó la preocupación del bloque por el modo de la designación. El proyecto fue rechazado por el resto de las bancadas. Según García, “las comisiones internas del Banco Provincia “han denunciado esta situación marcando una señal de alarma ya que consideran que la entidad se encuentra en la antesala de un gerenciamiento por fuera del recambio natural dentro de la línea”.