El futuro jefe de Gabinete nacional, Marcos Peña, le ofreció al diputado nacional por la Coalición Cívica Fernando Sánchez el manejo de la Lotería Nacional. Pero el legislador, fiel desde hace años a la conducción política de Elisa Carrió, rechazó el convite.
La razón de la negativa es que, en caso de dejar su banca, quien entraría en su lugar sería Julio Raffo, de Proyecto Sur. Por lo que la Coalición Cívica perdería una banca en manos de un sector enfrentado históricamente al PRO, el próximo partido de Gobierno. Un lujo que hoy no se pueden dar porque complicaría, aún más, las chances de la alianza Cambiemos de conseguir quórum en la Cámara de Diputados.
Sánchez viene siendo parte clave en la reestructuración política de la Cámara baja. Entre él, el futuro presidente de la Cámara, Emilio Monzó, y el presidente del bloque radical, Mario Negri, están diseñando los acuerdos internos para operar como interbloque. De hecho, le darían al cordobés Negri el cargo testimonial de “coordinador” de ese interbloque.
Entre ellos, más Graciela Camaño (Frente Renovador), también buscan elaborar una agenda de consenso para poder avanzar con proyectos clave durante el verano en sesiones extraordinarias. Entre ellas, la derogación del memorándum de entendimiento con Irán, el 82% móvil para jubilados y la reforma del Impuesto a las Ganancias. Aunque esto último también podría decidirse directamente en la Casa Rosada, una vez que asuma Macri.