A raíz de la reglamentación que acompañó al sistema de voto electrónico en la Ciudad de Buenos Aires impulsado por Mauricio Macri, los partidos políticos que cuentan con personería transitoria no estarían habilitados para participar de los próximos comicios. Una decisión que golpea fuerte al Partido de la Red, una agrupación que hace menos de dos meses colaboró con el PRO.
El Partido de la Red debutó en la política porteña en las elecciones legislativas del 2013 pero los votos obtenidos no le alcanzaron para sumar un diputado. No obstante, su campaña, basada fundamentalmente en las oportunidades que brinda la tecnología, le valió para conseguir una mínima base de conocimiento, en especial en el sector joven.
Según se indica en la página web oficial, el Partido de la Red “propone incorporar las oportunidades que Internet nos brinda para mejorar la democracia que tenemos”. “Proponemos un nuevo modelo de participación ciudadana, híbrido entre democracia directa y democracia representativa”, prometen desde su sitio oficial.
Ese discurso tecnológico “new age”, como suele suceder, prendió fuerte en el PRO y gustó a sus dirigentes. El encargado de acercarse a esta fuerza fue el vicepresidente 1º de la Legislatura porteña, Cristian Ritondo, quien a mitad de 2014 llegó a un acuerdo con esta agrupación compuesta en su mayoría por jóvenes.
Los integrantes de esa reciente fuerza política, que no tienen representantes legislativos, desarrollaron un sistema de participación online llamado “Demos” que posibilitó que los vecinos porteños elijan qué proyectos de ley desearían que avancen y sean aprobados por la Legislatura de la Ciudad.
De una lista de 16 iniciativas elaboradas por los distintos bloques del Parlamento local fueron seleccionadas tres que luego fueron discutidas en la Legislatura pero, finalmente, no lograron ser aprobadas en sesión ordinaria. Entre otras cosas, esto sucedió porque el mecanismo de participación ciudadana no es vinculante.
A pesar de esta convivencia y trabajo en conjunto entre el PRO y el Partido de la Red, cuando el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, firmó el decreto estableciendo la fecha de las elecciones y autorizando el sistema de voto electrónico, automáticamente, marginó de la contienda a la fuerza que le prestó colaboración a su propio espacio.
Resulta que, bajo la nueva reglamentación electoral que propone el Gobierno de la Ciudad, no hay lugar para los partidos políticos que no tienen personería definitiva en territorio porteño. Es decir, todas aquellas fuerzas que cuentan con un tipo de personería “transitoria” no podrían participar de los comicios en el 2015; algo a lo que sí accedieron en 2013, cuando los partidos con personería provisoria participaron de la contienda.
Concretamente, ese año, el Partido de la Red jugó en las elecciones legislativas locales con una boleta corta de diputados para la Legislatura porteña. Esa nómina la encabezaba el dirigente Agustín Frizzera que estaba escoltado por Pía Mancini y Santiago Siri, un reconocido columnista del programa Basta de Todo conducido por Matías Martín en la Metro que, además, es hermano del dibujante Ricardo “Liniers” Siri.
A todo esto, lo que le sucede al Partido de la Red también es sufrido por otras seis agrupaciones políticas que ya solicitaron al Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de Buenos Aires que interceda para que puedan participar de los comicios porteños.
Se trata del GEN, el Partido Social, el Partido del Trabajo y del Pueblo, el Partido por el Bien Común, Pueblo en Marcha y UPAA que, al igual que el Partido de la Red, exigen una medida cautelar para que la Justicia frente el uso del sistema de voto electrónico.
Además, de sus innovadoras propuestas de participación ciudad vía online, el Partido de la Red logró reconocimiento en el electorado porteño cuando comenzó su campaña en el año 2013 trasladando una réplica del Caballo de Troya a la Legislatura porteña.
“De la misma forma que, en la historia clásica, los griegos usaron el Caballo como estrategia para penetrar en la Troya fortificada, nuestro Caballo es una metáfora del objetivo del Partido de la Red: que todos los ciudadanos entremos al Parlamento”, explican en el sitio web oficial de la agrupación.
El espacio político, formado por una mayoría de jóvenes expertos en tecnología, twitteros, blogueros, sociólogos, politólogos y feisbukeros, nació en 2012, frente a lo que sus dirigentes denominaron “una crisis de representación en la sociedad”.