El país depositó el importe de las obligaciones que operaban el próximo lunes 30 de junio, luego de que Griesa rechazara el pedido de reponer una medida cautelar (stay) que protegiera esa operación de eventuales embargos.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, comunicó que la Argentina realizó un pago de servicios de capital e intereses de los bonos con legislación extranjera por 832 millones de dólares, de los cuales 539 millones fueron depositados en las cuentas números 15.098 y 15.002 que el Bank New York Mellon posee en el Banco Central.
Al mismo tiempo, amenazó con “acciones judiciales” a los Estados Unidos “por la responsabilidad internacional que le cabe” en relación al fallo.
Por su parte, los abogados de los holdouts se presentaron ante Griesa y solicitaron una audiencia para definir si la Argentina incurrió en “desacato”, por lo que el juez convocó a las partes a una audiencia que se realizará a las 11.30 en Nueva York.
El comunicado del Gobierno hizo saber que la Argentina depositó los dólares en las cuentas del Bank New York Mellon, en Buenos Aires, entidad a la que Griesa le había ordenado “no pagar” a bonistas regulares si el país no cumplía en forma simultánea con los holdouts.
Tras acusar a Griesa de “parcialidad en favor de los fondos buitre” y de “pretender llevar” a la Argentina “al default”, el comunicado gubernamental advirtió que “si alguien dispusiera” el embargo de los 539 millones de dólares girados al banco The New York Mellon incurriría en “apropiación indebida de los derechos de terceros”.
El magistrado deberá escuchar la explicación que darán los abogados de la Argentina que, en varias instancias, habían dicho que el país esquivaría las sentencias del letrado.
Lo que se especula es que Griesa decida decretar al país en “desacato” e imponga el embargo del dinero que sea girado a Nueva York por el pago del Discount.