LAN amenaza con dejar de volar en la Argentina

La línea aérea LAN advirtió hoy que podría dejar de operar en la Argentina a raíz de que el Gobierno le otorgó un plazo de 10 días corridos para que desaloje instalaciones que ocupa en el Aeroparque porteño, dando comienzo a una nueva disputa judicial entre la empresa de capitales chilenos y la Casa Rosada.

Así lo indicó el director de Asuntos Corporativos de esa compañía, Agustín Agraz, quien puntualizó que a última hora del martes LAN recibió una intimación del Organismo Regulador del Sistema Nacional Aeroportuario (ORSNA) para abandonar el hangar que utiliza en la zona sur de la estación aérea.

 

La decisión del Gobierno, además de ser interpelada por LAN ante la Justicia en las próximas horas, podría desencadenar un tironeo diplomático entre ambos países antes de que ministros y gobernadores argentinos se reúnan con funcionarios chilenos en un encuentro bilateral este viernes en Santiago.

 

En Chile, la decisión del gobierno de Cristina Kirchner provocó revuelo, “entendemos que ésta no es una acción aislada, sino que más bien una medida que estaría en línea con un creciente nivel de acciones en contra de nuestra empresa”, consideró el vicepresidente ejecutivo de Latam Airlines(la fusión entre LAN y la brasileña TAM), Enrique Cueto.

 

Para Cueto, el objetivo del gobierno nacional no es otro que “dañar” las operaciones de esa compañía en el país. 

 

En declaraciones que formuló a varios medios periodísticos a lo largo de la jornada, Agraz señaló que “recurriremos a la Justicia para hacer valer nuestros derecho. Tenemos un contrato firmado por el hangar y nuestra base de mantenimiento hasta 2023, con una inversión de 5 millones de de dólares y un canon mensual de 20 mil dólares”.

 

“La operación de LAN Argentina es inviable sin el hangar. Si nos lo quitan, nos veríamos obligados a dejar de volar a los 14 destinos de Argentina”, alertó, y precisó que se trata de una instalación de apenas 2.400 metros cuadrados (frente a los 18.000 m2 que ocupan Aerolíneas y Austral).

 

La decisión del Gobierno de emplazar a la compañía para que abandone la zona sur del aeropuerto metropolitano Jorge Newbery puso en estado de alerta a gremios aeronáuticos, que prometieron llevar adelante todas las medidas que sean necesarias para evitar la pérdida de puestos de trabajo.

 

“APTA (la Asociación Personal Técnico Aeronáutico) y ATCPEA (Asociación de Tripulantes de Cabina de Pasajeros de Empresas Aerocomerciales) se declaran en alerta y movilización permanente (…) El gobierno nacional es el responsable si se cierra la fuente laboral o se despiden trabajadores”, remarcaron ambos sindicatos.

 

En un comunicado de prensa que lleva la firma de los líderes gremiales Paula Marcon y Ricardo Cirielli, ATCPEA y APTA aseguraron que están dispuesto a “obrar con el máximo rigor y utilizando todos los medios sindicales y legales que sean apropiados” para defender a los trabajadores aeronáuticos que queden involucrados en el conflicto. Además, dijeron que la decisión del Gobierno persigue un fin “malicioso” y podría generar “nefastas consecuencias laborales y comerciales” en el sector.

 

La compañía de origen chileno es la principal competidora de Aerolíneas Argentinas, empresa manejada por el Estado nacional, en el mercado de vuelos de cabotaje.

 

A propósito, consultado sobre la finalidad que persigue la intimación del ORSNA, firmada por el presidente del organismo, Gustavo Lipovich, Agraz consideró que Aerolíneas se quiere “quedar con el monopolio” aerocomercial en Aeroparque.

 

“Es lo que yo imagino (…) Nosotros queremos competir con lealtad, esto es una guerra entre LAN y Aerolíneas o LAN y el Gobierno, nosotros queremos seguir invirtiendo y generando puestos de trabajo, porque queremos que la industria crezca en el país”, enfatizó el directivo.

 

Subrayó que la compañía presentará una medida cautelar en la Justicia, dando comienzo a un nuevo litigio judicial con el Gobierno o con una empresa estatal, después de haberse visto obligada a desembolsar unos 18.000 millones de dólares “por sobre un contrato que ya estaba firmado”, según Agraz, para destrabar semanas atrás un conflicto con la prestadora de servicio de rampa Intercargo.

 

La intención de la Casa Rosada es que LAN comience a operar desde el aeropuerto internacional de San Fernando, al norte del Gran Buenos Aires. Además de LAN, deben trasladarse a esa terminal aérea las empresas de taxis aéreos que venían utilizando las instalaciones del Aeroparque.

 

El traslado de operaciones a San Fernando estaba previsto originalmente para el primer día de este mes, pero la notificación, al menos a LAN, le llegó hace 24 horas.

 

Al argumentar su postura, la ORSNA recordó que “el ejercicio de derecho sobre los espacios de dominio público son siempre otorgados con carácter precario, o sea que el Estado no pierde por se préstamo la titularidad del bien del bien que se encuentra dentro del las instalaciones” del aeropuerto metropolitano.

 

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