Desde el Consejo de las Américas de Nueva York, en una enumeración de países de la región “verdaderamente democráticos y progresistas”, Vargas Llosa evitó citar a la Argentina y Ecuador, entre otras naciones latinoamericanas.
“¿Por qué cuando habló sobre democracia en Latinoamérica no mencionó a Nicaragua, Ecuador e incluso a la Argentina?”, preguntó, “porque estos países no son verdaderas democracias”, dijo.
“Creo que fui bastante específico con respecto a los países que están desarrollados política y económicamente. Cuba no es una democracia, Venezuela ya no es más una democracia, Nicaragua y Bolivia son semidemocracias, infectadas de populismo y autoritarismo”, respondió Vargas Llosa.
Según el escritor, Perú, Brasil, Chile, Colombia o Uruguay sí llevan a cabo políticas acertadas en términos de economía de mercado, lo que conlleva estabilidad institucional y progreso económico.
“No toda América Latina está progresando en el sentido en el que lo mencioné, sino que mencioné países específicos que yo creo que están yendo claramente hacia democracias más perfectas, o menos imperfectas como Chile, Colombia, Perú, mencioné a Uruguay y Brasil”, dijo el escritor peruano.
“Mi impresión es que ahora la orientación de Latinoamérica es hacia más democracia y hacia una mayor integración con el mundo democrático, estamos viendo la luz al final del túnel, hay esperanza y las cosas mejoran”, agregó después.
Vargas Llosa recordó que “la mayor parte de los países de América Latina tienen gobiernos civiles, nacidos de elecciones más o menos limpias y hay unos consensos muy amplios a favor de la cultura de la libertad, a favor de economías abiertas, que son las que están trayendo progresos a los países”. Sin embargo, advirtió que esos progresos no son homogéneos y que queda mucho por hacer”.