Política

Cristina repudió las agresiones a la embajada británica y “atendió” a Melazo

La presidenta de la Nación se mostró en contra de los ataques a la delegación inglesa el pasado 2 de abril y los calificó como “actos de vandalismo” y manifestó que no cree en “la quema de ninguna bandera para demostrar que se es más argentino; la bandera que debe flamear en lo alto es la bandera argentina”, a su vez, cuestionó el “acampe de 21 horas en la Avenida 9 de Julio”, al que calificó de “provocación”.

Cristina Fernández viajó a San Carlos de Bariloche  para entregar vivendas y aprovechó para referirse a los hechos del lunes pasado, “quiero dar unas palabras sobre los hechos que sucedieron contra la embajada”  que “no representan a la política y no creo en la quema de banderas”.

 

La jefa de Estado mencionó que le llamó “poderosamente la atención que en un gobierno de tanto avance en derechos democráticos, de tanto avance en materia de derechos humanos, surjan de repente estos grupos tan violentos que parecen servir a los intereses contrarios”.

 

A la vez, dijo que “más allá de que se vistan con ropaje seudo revolucionario, me llama mucho la atención, que con plena libertad y plena democracia sucedan estas cosas” y agregó, “parece que un titiritero con hilos escondidos manejara las cosas de atrás”.

 

A continuación hizo alusión a las palabras del Juez de Garantías de La Plata, César Melazo  y respondió “quiero decir que los jueces agarren el Código Penal, identifiquen a los que hacen estos actos y actúen en consecuencia”. Y al mismo tiempo explicó que “muchas veces lo que se busca no es un cachetazo sino un palazo o un tiro de un policía para que luego digan: `vieron, no es un gobierno popular, porque reprime a las protestas sociales”.

 

Además, Cristina hizo mención a que los habitantes de la Ciudad “sufrieron 21 horas de acampe en la 9 de julio” y al respecto dijo “no vamos a caer en ninguna provocación, no soy partidaria de la mano dura,  los palos en la argentina dieron malos resultados”.

 

Paralelamente, se refirió al fallecimiento del secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde y manifestó “dolor por el amigo que se fue” y subrayó la “vida de militancia” y su coherencia en las “ideas y convicciones”.

 

Según lo que informó la agencia oficial de noticias Telam, la presidenta argentina inauguró en el acto las refacciones a la pista de los aeropuertos de Bariloche y de Esquel, que implicaron una inversión de $76 millones de pesos y $22 millones, respectivamente.

 

Además, anunció la prórroga del requerimiento de impuestos para los contribuyentes de la región -afectada por la ceniza volcánica desde el año pasado- hasta el próximo mes de agosto, y un plan de 30 cuotas para los 2.700 contribuyentes en mora.

 

En ese sentido anunció que “ya tenemos 150 charters que van a venir directamente desde Brasil” y “Aerolíneas Argentinas va a poner un AirBus 350 directamente de San Pablo a Bariloche, y mañana se reabren los vuelos a San Martín de los Andes”.

 

Y por último, anunció que el próximo 25 de Mayo realizará el tradicional Tedeum en la Catedral de Bariloche y subrayó “porque a la Patagonia le faltaba un 25 de Mayo y lo queremos hacer aquí, en este lugar tan castigado que se levantó de las cenizas”.

 

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