PRECIOS SIN CONTROL

En plena convulsión, la oposición se alista para votar la ley anti tarifazo

La oposición busca aprobar la iniciativa que limita los aumentos en las tarifas de los servicios públicos. La Rosada ahora apuesta a frenarlo en el Senado.

Con un proyecto edulcorado por cambios de último momento, que buscan aplacar las críticas de los gobernadores y neutralizar las críticas oficialistas, la oposición se alzará este miércoles con una victoria en Diputados luego de aprobar el proyecto de Tarifas Justas impulsado por el interbloque Argentina Federal y el massismo, que busca ponerle un freno a los aumentos en las facturas de los servicios públicos.

 

La actividad en la Cámara será de doble turno y el debate de los proyectos ya establecidos en el temario estará cruzado por la crisis económico financiera y la decisión del Gobierno de volver al Fondo Monetario Internacional. A las 10.30, el oficialismo buscará dar inicio a la sesión especial que pidió para aprobar el proyecto de Financiamiento Productivo - antes conocido como Mercado de Capitales -, y la enmienda a un protocolo firmado con Brasil.

 

Para el primer proyecto, Cambiemos cuenta con el acompañamiento seguro del interbloque Argentina Federal y del Frente Renovador, que trabajaron en cambios en la ley y la votarán en el recinto. Los dos bloques opositores darán quórum en el inicio de la sesión. El kirchnerismo, por su parte, esperará a que el oficialismo reúna el quórum y luego bajará al recinto para votar en contra. En cuanto al proyecto de Defensa de la Competencia, como no tiene dictamen de comisión, es probable que su aprobación quede para otro momento.

 

 

 

Según se acordó este martes en la reunión que mantuvieron los presidentes de todos los bloques con el titular de la Cámara, Emilio Monzó, una vez terminada la sesión convocada por el oficialismo, se dará paso a la reunión pedida por la oposición para las 12 para tratar el tema tarifas.

 

En la oposición aseguran que el oficialismo se comprometió a quedarse en el recinto y dar quórum en la segunda cita. "Saben que igualmente tenemos quórum para empezar el debate. Van a preferir que no se note", razonó uno de los referentes del peronismo. Los intentos que hizo la Rosada en las últimas horas para intentar restarle apoyo al proyecto anti tarifazo fueron en vano. Ni las declaraciones de Marcos Peña, apelando a la responsabilidad de los gobernadores, ni las descalificaciones de Nicolás Dujovne, ni los ataques de Elisa Carrió generaron efecto en los diputados del peronismo que, por el contrario, se sintieron molestos por las constantes agresiones.

 

" El Gobierno está usando mucha energía en descalificar al otro. Y con nosotros no vale eso porque muchas veces lo hemos acompañado y en ese momento no éramos ni populistas ni demagogos", dijo el presidente del interbloque Argentina Federal, Pablo Kosiner. "Decir que el aumento del dólar, la corrida y la vuelta al FMI son culpa de la oposición porque va a aprobar un proyecto que modera el aumento de las tarifas es un disparate, no tiene ningún sentido", apuntó su comprovinciano Javier David.  En efecto, el interbloque Argentina Federal acompañará con su voto a la ley de Financiamiento Productivo, en la que introdujo cambios. De esta forma, volverá a mostrar que está dispuesto a colaborar con la aprobación de los proyectos que el oficialismo considera necesarios para gobernar y marcará una diferencia con el kirchnerismo, de posición intransigente.  

 

 

 

Según pudo saber Letra P, en el peronismo que responde a los gobernadores estuvo hasta último momento abierta la posibilidad de sentarse a negociar con el oficialismo una ley de tarifas que pudiera consensuar las dos miradas. Pero Cambiemos nunca intentó abrir el canal de diálogo. Con Monzó en retirada, el cambio de estrategia se sintió. "No convocaron a nadie a hablar. Ni a los gobernadores ni a los diputados. Cerraron todos los puentes", remarcó un diputado de Argentina Federal.

 

En ese escenario, los gobernadores lanzaron algunas críticas al proyecto pero dejaron hacer. La mayoría dio "libertad de acción" a sus diputados, que votarán el proyecto, y el cordobés Juan Schiaretti, que había sido el primero en apoyar la postura de la Rosada, terminó virando en su postura tras el enojo que le provocó la demanda que le hicieron los intendentes de Cambiemos en su provincia para reclamarle fondos de coparticipación.  

 

Así y todo, los diputados decidieron moderar aún más el proyecto, que mantiene dos características esenciales del texto original: retrotrae las tarifas al 1 de noviembre y establece, a partir de allí, un mecanismo de ajuste atado al índice de variación salarial. Por pedido de los gobernadores, y por tratarse de un impuesto coparticipable, los diputados eliminaron la rebaja del IVA que preveía el texto. Además dejaron afuera del dictamen lo que atañe a aumentos en transporte público y peajes.

 

 

 

Para Cambiemos, la derrota está asegurada. En el oficialismo daban este martes por sentado que el peronismo reuniría los números necesarios para aprobar la ley. Pero decidieron que ya era tiempo de sacar de la Cámara baja el tema que desde hace un mes tiene paralizadas las sesiones y las relaciones con la oposición. La pelota quedará después en manos del Senado, donde la Casa Rosada cree que los gobernadores tienen más chances de influir para evitar el voto de los legisladores. En último de los casos, acudirá al veto presidencial, ya anunciado por todos los voceros de Cambiemos.

 

Marcelo Lewandowski junto a Silvina Frana quien iba a ocupar la vicepresidencia del peronismo de Santa Fe.
Martín Soria, con respaldo del camporista Martín Doñate, se quedó con el Congreso del PJ Río Negro.

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