Violencia en el fútbol

Un nuevo escándalo con la barra en el club de Moyano y Ritondo

Tres autos y una moto interceptaron a Ariel Holan, DT de Independiente. Bebote Álvarez le exigió dinero y lo persiguió hasta una cena. Hay temor por el viaje a Paraguay de la semana próxima.

Integrantes de la barra brava de Independiente interceptaron a la salida de un entrenamiento al entrenador del primer equipo, Ariel Holan: le pidieron dinero, y ante la respuesta negativa, lo persiguieren y lo amenazaron. El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo -que además integra la Comisión Directiva del club presidido por Hugo Moyano-, anunció que se comunicaron con el Fiscal General de Lomas de Zamora para comenzar una investigación penal. El titular de la APREVIDE, Juan Manuel Lugones, realizó la denuncia. La semana que viene, el Rojo viaja a Paraguay y temen que estos delincuentes también vayan, para continuar con su amendrentamiento.

 

Este último jueves, Holan fue interceptado por tres autos y una moto en Villa Domínico. Fueron alrededor de 10 minutos, en un intercambio de palabras que fue subiendo de tono, por la negativa del DT de ceder a las amenazas del grupo de violentos, entre los que estaba Pablo "Bebote" Álvarez, que le exigió dinero. Cuando todo terminó y Holan se dirigió a cenar, como tenía pautado, los delincuentes lo siguieron y entraron a ese mismo lugar, en donde continuaron con las amenazas a pocos metros de distancia.

 

Holan prefirió no hacer ningún tipo de denuncia ni tampoco referirse al tema públicamente. Sin embargo esto salió a la luz y fue Ritondo quien al día siguiente comunicó que autoridades del Ministerio de Seguridad se comunicaron con el Fiscal General de Lomas de Zamora, de quien depende la fiscalía de Avellaneda con jurisdicción donde ocurrió el hecho, para comenzar una investigación penal, ya que es un delito de acción pública. Por ello, Lugones se presentó ante la Justicia para realizar la denuncia formal. "De esta manera se espera que las autoridades judiciales actúen según los procedimientos correspondientes, para lo cual colaborará la Policía de la provincia de Buenos Aires como auxiliar de la Justicia", expresaron desde el gobierno de María Eugenia Vidal.

 

No es la primera vez que sucede un hecho similar en Independiente. A fines de mayo, cuando Independiente fue a jugar a Perú contra Alianza Lima, por la Copa Sudamericana, la barra se hizo presente en aquel país y presionó al cuerpo técnico. Por eso hay temor de que el miércoles de la semana que viene, cuando el Rojo juegue por este mismo certamen en Paraguay, se vuelva a repetir idéntica situación, que parece ser incontrolable.

 

El mismísimo Ritondo, en declaraciones a radio La Red, se mostró en cierta parte resignado, al decir que pese a contar con derecho de admisión, los barras "salen del país y los aprietan afuera". "No es solamente Independiente, es Defensa y Justicia, Temperley, Gimnasia -que el otro día lo vimos al barra en el acto de Cristina-", agregó.

 

 

Cabe recordar que a principios de octubre, el estadio Libertadores de América fue escenario de un nuevo episodio marcado por la violencia, esa vez con la policía bonaerense como protagonista, que reprimió a los hinchas con balas de goma. Aquel domingo se vivió un hecho insólito, con las fuerzas de seguridad ingresando a una de las tribunas para descolgar una bandera. En aquel momento, en la Comisión Directiva asumieron condición de víctimas, creyendo que el trasfondo es más grave, que se busca "ensuciar a la institución" y sospechan que, en las sombras, podría haber una embestida del presidente Mauricio Macri contra el líder camionero cuyas razones excederían largamente los asuntos del club y se enlazarían con batallas de la alta política nacional.

 

Un mes antes, cuando los hinchas del Rey de Copas se retiraban de la cancha tras la victoria contra Atlético Tucumán, la Policía llevaba a cabo otro violento operativo para detener a un grupo de barras, que dos horas antes había encendido unas bengalas en la popular norte baja. El titular de la Aprevide destacó esa tarea realizada, mientras que en las redes los simpatizantes del Rojo le hicieron saber que entre los 120 detenidos hubo gente que nada tenía que ver con los violentos. Denunciaron también la utilización de gases lacrimógenos y balas de goma.

 

Por todo esto, el clima vuelve a complicarse en el club que a fin de año se elegirá presidente y Ritondo -ministro de Seguridad- vuelve a verse metido en el medio de una situación que parece ser inmanejable, en la previa de un nuevo viaje al exterior del equipo y con la posibilidad latente de que la barra también pise suelo paraguayo.

 

Victoria Villarruel, vicepresidenta de la Nación.
El gobierno de Gustavo Petro echó a diplomáticos argentinos de Colombia.

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