CPACF

Crisis institucional: Rizzo quiso frenar la asamblea y la oposición lo madrugó

Las agrupaciones acordaron sesionar en el bar del Colegio porque el presidente cerró el salón y suspendió, sin aviso, la reunión para designar autoridades y votar el presupuesto, entre otros temas.

Los representantes de las distintas agrupaciones políticas del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal (CPACF) se presentaron en el auditorio del primer piso del edificio el 6 de octubre al mediodía para participar de la segunda reunión de la Asamblea de Representantes, convocada el 25 de agosto tras el escandaloso encuentro del mes de julio, cuando se encontraron con una sorpresa: las puertas estaban cerradas y efectivos de seguridad custodiaban el predio. Como respuesta, se “mudaron” al bar de la institución y realizaron la asamblea sin la presencia del oficialismo.

 

Las cinco fuerzas de la oposición profundizaron su riña con el presidente del Colegio, Jorge Rizzo, y realizaron la asamblea sin presencia de miembros de Gente de Derecho. La reunión fue validada por una escribana pública, que acudió al edificio ubicado en Avenida Corrientes, a pedido de la oposición y gracias a un fallo judicial, para acreditar a los delegados e “informar” al Tribunal sobre lo acontecido.

 

El oficialismo tenía pensado ratificar lo sucedido en la anterior reunión de Asamblea, que terminó en escándalo, con amenazas, gritos y hasta una invitación a pelear por parte del titular del CPACF, como reveló Letra P. Tras ese encuentro, la oposición habló de “fraude” y planteó la nulidad de la asamblea porque, acusan, Rizzo, en su calidad de presidente y ya habiendo asumido, no puede ejercer el cargo de titular de la Asamblea de Representantes, función que ostentó durante los dos años en los que tuvo que delegar la titularidad de la institución a José Roberto López primero y más tarde a Eduardo Awad.

 

Esa polémica, como informó este medio, devino en un fallo judicial que obligó al presidente del CPACF a garantizar la presencia de un escribano público. Lo curioso fue que Rizzo quiso impedir la asamblea a la que había convocado en tiempo y forma semanas atrás.

 

Como respuesta, las agrupaciones Cambio Pluralista, Seamos El Colegio, Encuentro de Abogados y Bloque Constitucional acordaron hacer igual la asamblea. Se instalaron en el bar del organismo y avanzaron con el temario propuesto por el oficialismo.

 

La oposición se abroqueló y votó las autoridades de la Asamblea de Representantes y las comisiones, sin la opinión del oficialismo, que según denunciaron los adversarios políticos a Rizzo, “envió” emisarios a “filmar” el mitin opositor. La jugada, orquestada por las cinco agrupaciones opositoras, estableció el nuevo organigrama de autoridades: Juan Pablo Iunger (Encuentro de Abogados), presidente; María Elena Barbageleta (Seamos El Colegio), vicepresidenta primera; Natalia Ferrari ( ex Mariano Moreno que armó el bloque Abogados en Red y se ubican dentro de la organización política Libres del Sur), vicepresidenta segunda; Andrea Pérez (Cambio Pluralista), secretaria General; Alejandro Butler (Bloque Constitucional), secretario de Actas. Sobre el último vale la pena citar una curiosidad: en 2006 fue integrante del Consejo Directivo del primer gobierno de la agrupación de Rizzo.

 

La agrupación Mariano Moreno se dividió hace semanas. Un sector, vinculado a la agrupación Libres del Sur, participó de la asamblea de la oposición y otro no asistió y repartió críticas hacia Rizzo.

 

“Se está poniendo al CPACF al borde de una crisis institucional y poniendo en peligro el funcionamiento del mismo, demostrando que el único interés que mueve a la oposición liderada por los radicales PRO es apoderarse del CPACF en una actitud destituyente”, arremetió Juan Manuel Di Teodoro, presidente del bloque de la lista Mariano Moreno.

 

“Desde la Mariano Moreno exhortamos a Rizzo a convocar nuevamente a la Asamblea y a dialogar con todas las listas buscando consensos”, marcó. Por otra parte, agregó un “pedido” a “las listas que se nuclean por la sola oposición al presidente”.

 

“Respeten las reglas de juego y las instituciones del CPACF, de esa manera podremos debatir y discutir entre todos y todas, y por sobre todas las cosas, asumiendo el resultado de las últimas elecciones en la que los colegas definieron mayorías y minorías”, cruzó Di Teodoro.

 

La Asamblea rechazó la ratificación del primer encuentro y volvió a poner en discusión todo lo tratado en esa reunión. Por eso, se designaron autoridades sobre tablas, se autorizaron el valor del bono para consultar expedientes, la cuota de inscripción ($3400) y la matrícula ($1700).

 

Por otra parte, en un fuerte desafío al oficialismo, los opositores no aprobaron el balance de la última gestión (pasó a analizarse en comisión) y rechazaron el presupuesto, aunque decidieron avalar las partidas destinadas a salarios.

 

Además, definieron que las comisiones de la Asamblea de Representantes estén compuestas por 15 miembros titulares y 15 suplentes. De ese total, seis son para la agrupación de Rizzo, tres para Cambio Pluralista, dos para Encuentro de Abogados, dos para Seamos El Colegio, uno para la Mariano Moreno y otro para Bloque Constitucional. Ante este escenario, el oficialismo no cuenta con mayoría propia.

 

Por último, la asamblea volteó uno de los pedidos de Rizzo: el cambio del reglamento interno. Una de las iniciativas que el oficialismo quería aprobar la semana pasada era una modificación al reglamento para que las comisiones asesoras del Consejo Directivo las designe el propio Consejo y no el pleno de las comisiones, donde el oficialismo tampoco es mayoría.

 

RESIDENCIA RIZZO”. Nuevamente, el abogado Guillermo Jesús Fanego, ex colaborador de Rizzo e integrante del CPACF, repartió munición gruesa contra el presidente del organismo por intentar suspender la reunión de la Asamblea de Representantes.

 

A través de un comunicado que envió a su “amigos, colegas y conocidos” de Gente De Derecho (GDD), Fanego les pidió que “salven a la profesión, salven al CPACF, salven a GDD”.

 

“¿Hasta cuándo piensan continuar soportando los caprichos de nuestro querido Jorge? ¿No se han dado cuenta de todo el mal que le están haciendo? Hoy fue bochornoso y creo que está cayendo en un espiral que no tiene fondo y, lo peor de todo es que los está arrastrando a todos y con ello a nuestro Colegio y la dignidad de nuestra profesión”, arremetió el abogado.

 

Fanego no pertenece más a la orgánica del CPACF pero tiene su oficina justo en frente de la institución y, por lo tanto, fue testigo de una imagen única: vio como Rizzo salió al balcón del edificio de la Avenida Corrientes con una bandera de Gente de Derecho y empezó a cuestionar a sus colegas opositores, que recién terminaban la sesión de la asamblea.

 

Para Fanego, “la megalomanía” del presidente del Colegio “es cada vez más evidente” y “el poco decoro que demuestra con sus actitudes que hasta confunde el balcón de nuestro colegio con el palco de una cancha de fútbol”. “Tal vez los años que se encuentra alejado del ejercicio profesional han hecho estragos, aunque pensándolo bien, muchos de ustedes tampoco ejercen la profesión y sin embargo guardan cierto recato con vuestro obrar”, disparó, furioso.

 

“Hoy pretendió suspender una asamblea de delegados que debía realizarse en la “residencia Rizzo”, donde también funciona el Colegio de Abogados de la Capital Federal porque sí”, relató.

 

Fanego advierte en la misiva que “el Colegio es de todos los abogados” y “no solamente de Jorge Gabriel Rizzo” que, aclaró, “hizo muchísimas cosas buenas en el pasado y hoy las está destruyendo, por puro capricho y aburrimiento”.

 

Por otra parte, el ex miembro de GDD dice que Rizzo es kirchnerista, prepotente y autoritario. “La sociedad no admite más la corrupción, ni la prepotencia, ni el autoritarismo, ni el sectarismo. La actual conducción colegial se ha convertido en el último ramalazo de la kirchnerización como sinónimo de mala praxis, desunión y enfrentamiento”, subrayó.

 

“Es vergonzoso que el presidente del CPACF se asome al balcón con una bandera, vistiendo una “remera futbolera” y con gestos obscenos y patoteriles lance imprecaciones a sus oponentes, que solamente él logró unir ante el espanto que genera su conducta neroniana”, concluyó Fanego, con una nueva comparación de Rizzo con el emperador romano.

 

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