Política

Por pedido de Capitanich, llegan mil gendarmes para reforzar la seguridad

Marca la preocupación por el clima enrarecido que, por efecto Tucumán,  envuelve los comicios del domingo. La oposición ya agitó el fantasma del fraude.

ENVIADA ESPECIAL.- Alcanzada por el efecto Tucumán, la provincia de Chaco se prepara para las elecciones del próximo domingo en un clima de denuncias cruzadas. Mientras que el frente opositor Vamos Chaco, que lidera la radical Aída Ayala, advirtió sobre un "intento de fraude", el gobernador Jorge Capitanich aseguró que se trata de una "campaña sucia" y solicitó al Gobierno nacional el envío de mil gendarmes para "garantizar la paz y la democracia". Además, habrá veedores internacionales.

 

Los efectivos de la fuerza federal de seguridad, que habitualmente son 400 en esta provincia, servirán de apoyo a la Policía provincial y se ocuparán de custodiar el traslado de las urnas -no de manipularlas-, los centros de votación y la sede del recuento provisional. Lo harán en el marco de un operativo coordinado por el Tribunal Electoral de la provincia.

 

No obstante, tal como había publicado Letra P, la presidenta del Tribunal Electoral, María Luisa Lucas, reiteró en las últimas horas que la transparencia de las elecciones, que se desarrollarán con sistema de boleta única electrónica en un tercio de las mesas (ver nota aparte: "Por un acuerdo entre..."), está "garantizada". "Chaco no es Tucumán", aseguró.

 

La jueza se mostró molesta con la oposición por las denuncias sobre presuntas irregularidades en el padrón electoral. "Pretende que el Tribunal resuelva, a cuatro días de las elecciones, algo que no es de su competencia", protestó.

 

El frente Vamos Chaco, integrado por radicales, socialistas, massistas, lilitos y municipales, presentó esta semana una denuncia ante el Tribunal para que "se investiguen irregularidades que podrían empañar el acto electoral previsto para el próximo domingo" ante la posible comisión del delito de "falsificación o adulteración de documentos nacionales de identidad".

 

Según explicó el espacio en un comunicado, tras cruzar el padrón chaqueño con los de otros distritos, se llegó a la conclusión de que más de siete mil electores figuran habilitados para votar en otras provincias, según el padrón que se utilizó en las primarias del 9 de agosto. Además, señalan otras supuestas irregularidades, como la inclusión de electores de más de 100 años de edad. En total, serían alrededor de 12 mil votantes impugnados.

 

Frente a las denuncias, la presidenta del Tribunal Electoral aseguró que el tema no es de competencia provincial sino que depende de la Cámara Nacional Electoral e instó a los partidos políticos a impugnar el voto "cuando haya dudas sobre la identidad del votante".

 

"No admito que pretenda hacernos creer a los chaqueños que en una elección provincial haya que recurrir a registros electorales confeccionados por autoridades nacionales", le reclamó el ex gobernador radical Ángel Rozas. El senador dijo tener " la suficiente autoridad política" para pedir que Chaco "vuelva a votar limpio". "En 2007 perdí por 950 votos y no denuncié fraude", recordó.

 

Este jueves, las dos fuerzas mayoritarias hicieron sus respectivos cierres de campaña en la provincia. Mientras Capitanich prometió que el pueblo chaqueño dará una muestra de “civilidad”, el candidato a gobernador porque el Frente Chaco Merece Más, Domingo Peppo, aseguró que se votará “en paz y con transparencia” y acusó a la oposición de estar “nerviosa”. “Nosotros no tenemos la culpa de que el pueblo no los quiera votar", dijo.

 

Las primarias abiertas provinciales, que se celebraron el 24 de mayo, ubicaron como ganador al candidato del oficialismo, Peppo, con el 56,77 por ciento de los votos. El Frente Chaco Merece Más, al que reporta Peppo, obtuvo el 59,81 por ciento, 21 puntos más que el Frente Vamos Chaco,  que llevaba como candidata a Ayala. Más atrás quedaron el Partido Obrero, con Aldo García, que obtuvo el  1,93 por ciento, el Frente Popular Sur, con Danilo “Polo” Legal, que cosechó el 0,66, y el Movimiento Independiente de Justicia y Dignidad, que llevó a Noemí Álvarez y obtuvo el 0,29 por ciento de los votos.

 

En el oficialismo provincial ya pronostican que la diferencia será “mayor” que en las PASO y ya hablan de 25 puntos de diferencia. Aunque aseguran que “no va a haber problemas” en los comicios, temen que la oposición se monte sobre el escándalo de Tucumán. “El Tribunal Electoral no está manejado por el gobierno provincial sino por una jueza de origen radical. En las PASO hubo una diferencia enorme y la oposición no dijo nada, y además hay boleta electrónica, pero algo van a salir a decir”, explican desde el entorno de Capitanich.

 

En Resistencia, casi no hay dudas de que Peppo se impondrá sobre Ayala y que Capitanich se convertirá en el nuevo intendente de la capital. “En vez de ir a la Casa de Gobierno, en diciembre todos van a desfilar por la intendencia”, dicen los dirigentes locales.

 

Además de gobernador y vice, Chaco, con un padrón de 859.161 ciudadanos en condiciones de votar, elige 69 intendentes, 16 diputados provinciales y concejales. 

 

Aníbal Fernández. 
Sergio Massa reúne al Frente Renovador. 

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